Judiciales
Fiquepron, en el ojo de la tormenta
Evita Pueblo: Denuncian persecución de médicos que piensan distinto a la dirección
La historia que demuestra la falta de muñeca política por parte del ministro de Salud bonaerense, Andrés Scarsi, nos lleva en este caso al hospital de Berazategui, Evita Pueblo. Allí, una amiga del funcionario, que actúa como directora, silencia a quienes opinan diferente.
Otro hecho que demuestra la altura política de la gestión actual del ministerio de Salud se ha conocido en estas últimas horas. En esta oportunidad fue en el hospital Evita Pueblo, de la localidad de Berazategui, en donde el patriarcado de los Mussi gobierna desde hace muchos años.
Según pudo reconstruir REALPOLITIK a través de diversas fuentes, la directora del nosocomio en cuestión es amiga del actual responsable de la cartera de Salud bonaerense y hace y deshace dentro del instituto sin respetar ningún tipo de reglas.
Karina Fiquepron, quien asumió en reemplazo de Rodrigo Castañeda, fue directora provincial de Hospitales de la provincia para luego incorporarse a la plantilla directiva del Instituto de Salubridad.
En este sentido, fueron varios los médicos que señalaron la malapraxis de la doctora como responsable del hospital que supo tener sus mejores años cuando al frente del mismo estuvo José Potito, quien fue reconocido por toda la comunidad de la institución. Como consecuencia de esas opiniones contrarias al accionar y ordenes de la gestión, una profesional de la salud debió pedir licencia sin goce de haberes por el lapso de un año.
Sin embargo, la persecución protagonizada desde la dirección no se detuvo luego de que la mujer en cuestión se aleje de su espacio laboral de forma momentánea, sino que continuó y se endureció como resultado de la mediatización del cierre del vacunatorio, el estado de la morgue y diferentes cuestiones que ponían el foco en el Evita Pueblo y en Fiquepron como directora médica responsable del hospital.
Así es que la médica damnificada fue recientemente borrada de un boletín informativo sobre cuestiones que ocurrían en el hospital y del cual sus empleados debían estar al tanto. Este acto claro de discriminación fue consultado a la propia responsable del nosocomio, quien respondió que la decisión tomada era parte de sus atribuciones como directora.
Sin embargo, la médica que debió tomarse licencia sigue siendo empleada del hospital y deberá reincorporarse cuando su periodo licenciatario se corte, por lo cual sigue formando parte de la plantilla activa del Evita Pueblo. Esta razón debería ser suficiente como para poder seguir siendo informada de las cuestiones cotidianas, al igual que todos los médicos, para ayudar en la realización de su tarea diaria.
Desde este aspecto, se evidencia el accionar antidemocrático, persecutorio y discriminatorio que se observa en la gestión de la amiga de Scarsi, que replica prácticas propias del ministro de Salud.
Finalmente, desde el municipio que conduce Patricio Mussi, prefieren evitar referirse al problema, como agradecimiento a la gestión de María Eugenia Vidal por la entrega de los móviles del SAME. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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