Incontrolable: Elisa Carrió escrachó a Daniel Angelici en una presentación judicial

Cualquiera podría creer que Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors y hombre clave detrás de ministerios, organismos nacionales y provinciales y uno de los principales operadores políticos del país, estaría a salvo del fuego amigo. Sin embargo, parece que nadie queda afuera de las acusaciones de Carrió, quien una vez más volvió a demostrar por qué se ganó fama de “denunciadora serial”.

En la declaración judicial que ella misma brindó el 29 de marzo de 2016 en el juzgado Criminal y Correccional Federal número 7, se refirió a los operadores políticos como “personas paraestatales que no tienen una función institucional delimitada que mantienen relaciones amistosas con miembros del Poder Judicial e interfieren en causas ligadas a distintos tipos de crímenes federales o actos de corrupción donde estuvieran comprometidos funcionarios públicos”. Sobre el tema, hizo un racconto desde los años noventa, en los que esa figura fue representada por el doctor Barra y luego por Javier Fernández durante la década kirchnerista.

Sobre el mismo, comentó que “en esa década el operador paraestatal era Fernández, auditor de la nación, y según algunos amigo íntimo de Jaime Stiuso, jefe de Inteligencia predilecto de Néstor Kirchner”.

No se detuvo allí, sino que continuó con la gestión de Mauricio Macri. Sobre el mismo, aclaró que “sellamos un acuerdo, entre el PRO, con Mauricio Macri, la Coalición Cívica conmigo y la Unión Cívica Radical, es decir, Ernesto Sanz, con el objetivo de rebajar sustantivamente los impuestos a la clase media, finalizar con el juego y la impunidad. Sin embargo, tomé conocimiento de que un tal señor Angelici, que no sabía quién era, hablaba con Oyarbide pidiéndole que se jubilara, almorzaba con jueces y fiscales vinculados a Boca y que “ayudaba”, como lo dijo el propio presidente, a Macri”.

Algunas líneas más adelante, declara que “empecé a escuchar que el que se iba a encargar del Consejo de la Magistratura era Angelici entonces de dediqué a estudiar quien era Angelici, era uno más en la larga tragedia nacional de operadores y vínculos promiscuos entre operadores políticos, la Justicia, los servicios de inteligencia y los clubes de fútbol. Había visto en varias causas judiciales y en escuchas telefónicas de expedientes de narcotráfico a figuras de barras bravas del fútbol entre ellos uno llamado el uruguayo, barras ligadas a hinchadas unidas, Marcelo Mayo muy amigo de Rudy Ulloa Igor que quería comprar el ex mandadero de Kirchner TELEFE por trescientos millones de dólares. También lo investigué y supe que es un ser del juego. En distintos lugares del país tiene sociedades ligadas al juego (…) estoy harta. Harta de tener que tener custodia permanente cuando los asesinos y los delincuentes están libres”. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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