Nacionales
Intromisión de poderes
Con el radicalismo en contra, Macri arremete contra Ramos Padilla
La visita de Mauricio Macri al inicio del ciclo 2019 de “La Cornisa”, programa conducido por el vocero extra-oficial Luis Majul, no parece haber dado los resultados esperados.
La primera decepción se produjo en el programa per se, ya que la tan anunciada presencia presidencial apenas sumo 4,1 puntos de rating, ubicándose en el tercer lugar entre los cinco canales de aire. Como es sabido, los domingos en general son días de relleno dentro de la programación. Aún así, la audiencia decidió mirar para otro lado.
Tampoco cayeron bien las declaraciones de un presidente molesto y disgustado con la realidad que su propio gobierno provocó. Si bien Jaime Durán Barba parece haberle aconsejado “despegarse” de la figura de Franco Macri, su grave denuncia sobre las acciones delictivas de su progenitor, a menos de quince días de su fallecimiento, generaron una ola de escozor a partir de su viralización por las redes sociales. Muchos se preguntaron si su afirmación de que “Cristina es una persona que niega la realidad” no tendría el sujeto equivocado. La sospecha de que el entorno presidencial escribe un nuevo “Diario de Yrigoyen” aparenta tener cada vez más fundamento.
Pero lo más grave de su monólogo –ya que Majul fue un mero espectador del programa-, en términos institucionales, fueron sus juicios sobre el juez Federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, que para los expertos constituyeron una manifiesta violación de la autonomía de los poderes propios de una república.
Fernando Miguez, presidente de la Fundación por la Paz y el Cambio Climático, adelantó que hoy efectuará una denuncia por “intromisión” contra el presidente, su ministro de Justicia, Germán Garavano, y el hombre del poder ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, Juan B. Mahiques, quien en el día de ayer elevó la solicitud de juicio político contra el juez Ramos Padilla.
“El presidente no puede criticar al poder judicial, tiene que tener probidad y si tiene alguna animosidad personal contra algún magistrado lo tiene que expresar en otro contexto, no puede ser que lo denuncie y lo destituya. Al juez lo tenemos que dejar investigar, más en una causa tan sensible como esta”, declaró Miguez, al tiempo que denunció “animosidad manifiesta” en el accionar el ejecutivo.
En su afán por demostrar que mantiene el control absoluto sobre el sistema institucional, Macri formuló declaraciones, en el programa de Majul, que lo colocan en manifiesta situación de “intromisión de poderes”, ya que no solo reconoció que había ordenado al ministro Garavano denunciar al juez ante el Consejo, sino que también se habían impartido instrucciones al citado Mahiques para que cumpla a rajatabla la directiva presidencial, para conseguir la destitución del juez de Dolores.
"Que un presidente de la Nación ordene remover a un juez es claramente violatorio de la constitución, y el presidente que viola la constitución queda sometido a la posibilidad de un juicio político", sostiene el escrito de Miguez.
Según confirmaron diversos espacios políticos, se estarían presentando varias denuncias por intromisión, animosidad manifiesta y violación de la norma constitucional.
El jefe del bloque de Diputados nacionales del FPV-PJ, Agustín Rossi, presentó un proyecto para interpelar sobre el tema al ministro Garavano, dejando constancia de que, en realidad, las aclaraciones del caso deberían ser formuladas por el presidente Mauricio Macri.
La decisión del gobierno ha puesto en estado de alerta al poder judicial. También resulta bastante improbable que el ejecutivo consiga un dictamen favorable en el Consejo de la Magistratura para la destitución de Ramos Padilla, ya que solo cuenta con cuatro votos propios y no parece, prima face, plausible que los representantes de la UCR lo acompañen en esta ofensiva. De hecho, y más allá de cuestionar algunas actitudes del juez en cuestión, la opinión preponderante dentro del radicalismo califica como una “monstruosidad”, en un año electoral, respaldar lo que buena parte de la sociedad considera como un intento de obstrucción del proceso judicial, cuando el material probatorio comienza a rozar al propio entorno del ejecutivo. (www.REALPOLITIK.com.ar)
¿Qué te parece esta nota?
MÁS NOTICIAS