Cuatrocientas familias en la calle y 50 mil pasajeros sin colectivos

Ayer enviaron una nota al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, pidiendo la intervención en el conflicto. “Las unidades están cada vez peor porque no se reparan y la empresa que vendía los repuestos ya no entrega más insumos por falta de pago”, dijeron en diálogo con REALPOLITIK.

Expreso Lomas es una de las firmas con mayor caudal de colectivos que une el conurbano con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Precisamente las líneas de colectivos 112, 165 y 243 cuentan con ciento veintidos “coches”, de los que solo están funcionando menos de la cuarta parte. Es por la falta de inversión en el mantenimiento, reparación y una mala administración que terminó en manos de la Justicia, al parecer, por maniobras poco santas de los socios.

“La semana pasada nos reunimos en asamblea general para resolver los pasos a seguir y se resolvió seguir prestando el servicio con cuarenta unidades de las ciento cuarenta que tenemos. Con eso solo llegamos a cubrir el ramal de la 165 que une Monte Grande con Once pero la falta de reparación y el uso hizo que las maquinas se fueran rompiendo. Fue así que desde el martes pasado se decidió paralizar totalmente los servicios”, dijo Patricio Alomo, delegado gremial.

Las líneas del Expreso Lomas son la 112, que une el partido de Lanús con el barrio de Saavedra; 165, que une Monte Grande (partido de Esteban Echeverría) con Once; y la 243, que une Monte Grande con Lomas de Zamora.

Según dijo Alamo, “nosotros llevamos más de 50 mil pasajeros por día. Con la paralización del servicio la gente ahora tiene que tomar dos o tres colectivos para llegar a su trabajo. Cada boleto sale veinte pesos. Imaginate lo que gastan por día”, reflexionó.

“Tenemos las unidades con problemas en los frenos, suspensiones, amortiguadores, gomas lisas y circular en esas condiciones es un riesgo para los choferes, los que viajan en el colectivo e incluso para la gente que está en la vía pública. Los responsables de este problema tienen que entender que están poniendo en riesgo la vida de terceros”, sentenció el gremialista.

Pero el caso del Expreso Lomas no es novedad para los usuarios de la región. La empresa atraviesa problemas de larga data. Ya a principios de 2018, debido a la falta de combustible, el servicio quedó sin funcionar más de un mes. En esa ocasión, los trabajadores denunciaron el vaciamiento de la empresa y pidieron intervención de la Justicia ya que los dueños se habían declarado en quiebra.

Complicada, la línea siguió funcionando. Sin embargo, en medio del conflicto gremial actual, un incendio en los talleres de la 165, levantó la polémica. Quince unidades en desuso fueron destruidas por las llamas y los trabajadores quedaron en el ojo de la tormenta. Desde el gremio negaron responsabilidades. El caso aún está siendo investigado.

Mientras el paro continúa, los choferes esperan un comprador que invierta y habilite los servicios con normalidad. Mediante una nota enviada a Dietrich explican lo que pasa con la empresa y su situación laboral.

Allí denuncian la “falta de mantenimiento, presupuesto y principalmente el desinterés del sector empresario por subsanar las necesidades básicas de las unidades, situación emergente del uso y del desgaste del parque móvil”, por lo que se hace “imposible proseguir con el normal funcionamiento del desarrollo de actividades diarias, ya que están al 8 por ciento de la capacidad operativa del parque automotor”.

Y cierra pidiendo que “Expreso Lomas cumpla con la obligación y responsabilidad empresarial para así poner fin a la indiferencia e inacción que padecemos los trabajadores”.

En su perfil de Facebook “Agrupación La Loma”, los trabajadores explican: “Las decisiones judiciales, la incertidumbre y la preocupación por nuestra fuente laboral hacen que tengamos que tomar este tipo de medidas”. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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