Sánchez Zinny restringe los fondos que se derivan a consejos escolares y congela obras en escuelas

Desde Tres Arroyos se quejan de la gestión que desde la provincia de Buenos Aires ejerce Gabriel Sanchez Zinny y su equipo en el envío de fondos que el gobierno de María Eugenia Vidal debe hacer llegar a los consejos escolares para que los mismos puedan funcionar con normalidad. La presidenta del ente que administra las escuelas en aquella localidad, María José Adobatto, apuntó sin pelos en la lengua a los funcionarios bonaerenses.

La titular explicó que la gestión de Cambiemos retrasa el envío de fondos haciendo que se haga imposible realizar obras por el impedimento de contar con un presupuesto fehaciente que permita abonar en tiempo y forma a los prestatarios de servicios e insumos. En este sentido, esto produce que, con la gran inflación, el retraso impacte en cualquier obra ya que los materiales empiezan a subir y el dinero no alcanza.

Asimismo, detalló que de los 5 millones de pesos que la provincia le adeuda al Consejo Escolar de Tres Arroyos, sólo le enviarán la mitad, produciendo que las obras a realizarse no puedan hacerse por falta de fondos. Desde este aspecto, una obra importante es la que se debe desarrollar en la escuela Nro. 54 del distrito, en donde se tiene que reparar un techo que tiene un costo equivalente a la suma que recibirá el ente educativo local, dejando así a las otras escuelas sin partidas para sus obras.

Si bien la refacción del instituto educativo público en cuestión se espera hace años, no es justo -según Adobatto- que los demás colegios no puedan recibir los reacondicionamientos que ya se venían acordando con el Consejo. Esto hace que la funcionaria esté obligada a decidir entre una u otra obra y por ende en beneficiar a unos u otros chicos que asisten a las distintas escuelas.

Desde la provincia argumentaron en su momento que el retraso se debió a la tardía rendición de fondos que el ente debe hacer a la DGCyE. Sin embargo, la presidenta del Consejo tresarroyense lo niega, explicando que las partidas ya fueron debidamente presentadas y aún los fondos no han llegado, ni lo harán en el tiempo debido. 

Es al menos extraña la excusa esgrimida desde la provincia cuando desde la dirección General de Cultura y Educación se malversaban fondos a través del funcionario que precisamente estaba a cargo de la dirección Provincial de Infraestructura Escolar, Mateo Nicholson. 

A su vez, la gestión bonaerense debería poner el acento en reforzar estas cuestiones que tanto dolor de cabeza han traído tras las muertes en Moreno y los sucesos de Pilar, que generaron duros cuestionamientos por parte del cuerpo docente durante el cierre de paritarias anunciado recientemente. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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