Viernes 26.04.2024 | Whatsapp: (221) 5710138
25 de abril de 2019 | Nacionales

¿Candidato presidencial a pesar suyo?

Envuelto en la trama cordobesa, Schiaretti entra en la discusión presidencial

Juan Schiaretti detenta un liderazgo incuestionable sobre los gobernadores peronistas. Su figura y su capacidad política, que pocos conocían más allá de la provincia de Córdoba, explotó tras la muerte de su coterráneo José Manuel de la Sota.

facebook sharing buttonCompartir
twitter sharing button Twittear
whatsapp sharing buttonCompartir
telegram sharing buttonCompartir
print sharing buttonImpresión
gmail sharing buttonCorreo electrónico

por:
Alberto Lettieri

Él fue, tal vez, el vértice más importante para la creación de Alternativa Federal. Algunos -erróneamente- adjudicaban ese protagonismo a su explícita prescindencia respecto de una eventual candidatura presidencial. Otros que lo conocían en detalle no se mostraron sorprendidos. Simplemente, su brillante carrera había esquivado, por decisión propia o por reparto de funciones con De la Sota, las luces de Buenos Aires.

Pero el tiempo va transcurriendo y la candidatura de Roberto Lavagna no termina de oficializarse. También su exigencia de expresar un consenso amplio, excluyendo una interna dentro del espacio de Alternativa Federal, significa un punto en contra dentro del peronismo. La posición de Lavagna es comprensible, ya que se imagina como referente de un espacio pluripartidario que incluya a socialistas, radicales alfonsinistas, gens y peronistas, y participar de una PASO exclusivamente peronista le parece un contrasentido. Sin embargo, es esta posición inflexible la que dilata la concreción de su postulación.

De este modo, el tiempo transcurre rápidamente y los resultados no aparecen. Todos los ojos están puestos en las PASO cordobesas del 12 de mayo, que convertirán a Juan Schiaretti en el gran elector del peronismo federal. En el entorno de Roberto Lavagna se abriga la expectativa de que, tras la victoria, Schiaretti bendiga la candidatura del economista y lo exima de participar de una PASO.

Pero varios gobernadores peronistas han dejado trascender, informalmente por ahora, su disconformidad con esta opción. Es sabido que Gustavo Bordet y Sergio Uñac, las dos nuevas grandes esperanzas del peronismo federal, han apoyado la candidatura de Lavagna, aunque PASO de por medio. Y allí la cuestión vuelve a foja cero.

Esta indefinición ha llevado a varios gobernadores peronistas a pergeñar un plan b, consistente en ofrecerle la candidatura al jefe natural del espacio, el propio Schiaretti. El cordobés no se siente aún demasiado tentado con la idea: algunas cuestiones de salud y ciertas trabas constitucionales de la provincia dificultan que el gobernador en funciones y seguramente próximamente electo por amplio margen pueda presentarse como candidato a la primera magistratura nacional. También le preocupa cómo podría tomar la sociedad cordobesa la resignación de la responsabilidad que próximamente volverá a confiarle.

Hay también una cuestión de superposición de agendas, ya que el cierre de listas nacionales está pautado para el 22 de junio, lo que encontraría a Schiaretti en plena campaña por la reelección en la provincia. Y, como es sabido, quien mucho abarca poco aprieta.

Sin embargo, los gobernadores insisten en que se trataría de escollos subsanables, tal vez con una licencia hasta el fin del mandato actual. Algunos deslizan que este plan b sería una estrategia de presión para que Lavagna modifique su posición, hasta ahora irreductible. Otros, en cambio, lo ven como la salida natural en caso de que el economista resigne finamente su candidatura.

Pero, más allá de las especulaciones, el nombre de Juan Schiaretti suena cada vez más fuerte entre sus pares. Y a nadie escapa que la alianza que construyó para respaldar su candidatura cordobesa anticipa el armado pluripartidario imaginado por Alternativa Federal.

Quedan aún más de dos semanas para las PASO cordobesas. Difícilmente haya definiciones antes de esa fecha en cuanto a candidaturas del espacio que se propone como tercera opción, aunque todos son conscientes de que el tiempo se agota, y que una dilatación de los tiempos pone en riesgo la propia supervivencia del espacio. Pero no quieren correr el riesgo de equivocarse. (www.REALPOLITIK.com.ar)


¿Qué te parece esta nota?

COMENTÁ / VER COMENTARIOS

¡Escuchá Radio Realpolitik FM en vivo!