La Suprema Corte pide más presupuesto pero sus gastos están bajo la lupa

En una carta redactada en duros términos, la Suprema Corte bonaerense reclamó un aumento de presupuesto a la provincia, con el objetivo de cumplir con los gastos y servicios que afronta el cuerpo colegiado. En ella detalló que, de no existir un aumento, se pondría en duda la continuidad de obras de infraestructura edilificia para el correcto funcionamiento de los tribunales y, además, la imposibilidad de continuar alquilando viviendas para el funcionamiento de oficinas administrativas.

La misma fue firmada por los seis miembros, Hilda Kogan, Daniel Soria, Luis Genoud, Héctor Negri, Eduardo Pettigini y el reciente presidente Eduardo De Lázzari. El único que se negó a firmar fue Julio Conte Grand, quien fue designado por la gestión de María Eugenia Vidal y no quiso contrariar a sus superiores.

No obstante ello, funcionarios de Gobernación señalaron que los gastos de la Suprema Corte son, en numerosos casos, “irresponsables y faltos de criterio” para una economía que atraviesa una severa crisis de deuda.

En este sentido, llama la atención los gastos “extras” en los que la Suprema Corte suele incurrir. Tan sólo en un lapso de 30 días,  se tramitó el pago de algo más de 30 millones de pesos entre fotocopiadoras, servicio telefónico, resmas de papel, alquiler de viviendas y hasta 4.8 millones de pesos para vigilar el semi-abandonado edificio que el organismo judicial tiene en la calle 514 y camino General Belgrano de La Plata.

A este ritmo, y sin contar salarios, aportes, impuestos y servicios, la Suprema Corte gasta en promedio 1 millón de pesos por día, un número que para una provincia de escasos suministros representa una mochila cada día más pesada. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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