Provincia gastará 36 veces más en intereses de deuda que en medidas de alivio

Un informe de la agencia Analogías sobre la situación económica y financiera de la provincia de Buenos Aires despertó preocupación en el círculo íntimo de la gobernadora María Eugenia Vidal. Se observó, entre otras cosas, que la abrumadora insatisfacción que los bonaerenses mostraron con el gobierno en las PASO de agosto tiene que ver, y no en menor medida, con un manejo poco eficiente de las cuentas públicas.

En un escenario signado por la devaluación y la profundización de la crisis, comenzaron a revelarse las primeras disputas puertas adentro de la coalición oficialista. La reacción del gobierno de Vidal fue la de copiar a Mauricio Macri y a su nuevo ministro de Economía, el ex bonaerense Hernán Lacunza. Así, desde la Casa de Gobierno de calle 6 se intentó lanzar un paquete de medidas paliativas. No contaban, lamentablemente, con el mal timing del presidente.

Es que las medidas de Macri, quien firmó el permiso para eliminar el IVA en algunos de los bienes de la canasta básica alimentaria, bonos por única vez para empleados públicos y la elevación del mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias, perjudican a Vidal y a su equipo de asesores.

Resulta que el IVA y el impuesto a las Ganancias son coparticipables, con lo que los paliativos que salieron de Casa Rosada dejaron con menos dinero a la provincia de Buenos Aires, que entonces vio notablemente reducida su espacio de maniobra para ensayar medidas propias. Así, las medidas que iba a anunciar Vidal primero se demoraron, y luego tuvieron un magro impacto político.

Los números, lejos de acompañar, parecieran condenar al gobierno bonaerense al plano de los que menos eficientemente han administrado el dinero público. Entre el refuerzo del PREBA para los empleados de las PyMEs, del plan Más Vida,  del Servicio Alimentario Escolar, la ayuda económica anunciada para las víctimas de violencia y la elevación de la jubilación mínima, alcanzaron a invertir 1.952 millones de pesos hasta diciembre.

Este número, que a priori parece mucho, es en realidad una mínima parte de lo que el gobierno de Vidal deberá pagar sólo en los intereses de la deuda que ha tomado. A sólo modo de ejemplo, durante el 2019 los intereses en deuda pública suman más de 50 mil millones de pesos con un dólar a 40,1. Si tenemos en cuenta el desproporcionado incremento  que sufrió la moneda norteamericana en las últimas semanas, el monto asciende tranquilamente a unos 70 mil millones de pesos. De este modo, se puede afirmar que Vidal y compañía han invertido 36 veces más en pagar los intereses de las deudas, que en aliviar a sus votantes de los impactos de las medidas que ellos mismos tomaron. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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