Tagliaferro en caída libre: Concejal de su riñón lo critica y arma bloque unipersonal

El concejal de Morón Nicolás Canario Soto presentó su renuncia al bloque oficialista y criticó duramente al intendente Ramiro Tagliaferro. Tras formar el bloque unipersonal Argentina de Pie denunció clientelismo, malversación de fondos y apriete a empleados municipales para que trabajen en la reelección del jefe comunal. “No puedo seguir siendo cómplice del más descarado de los clientelismos políticos nunca antes visto”, expresó.

De mal en peor. Tagliaferro viene de perder la PASO con el Frente de Todos. Después de la elección las denuncias no se hicieron esperar. Vecinos mostraron videos donde camiones municipales trasladan mercadería y materiales de construcción con el nombre del jefe comunal. También se vieron caramelos, bolsas de ropa y llaveritos con su sello. Paralelamente, los médicos del Hospital Morón denunciaron el vaciamiento del sistema de salud y marcharon frente al municipio para reclamar respuestas.

Tagliaferro recibió todo tipo de críticas. Y si algo le faltaba era que se rompiera el bloque. Además renunció una profesional del área de obras públicas denunciando que la sacaron del área para trabajar en la mesita de campaña y difundir la gestión a fin de promover la reelección.

Canario Soto está enojado y se despachó contra el intendente. El hombre era secretario de una fiscalía en Morón y llegado a la política, Tagliaferro le había prometido que iba a ser nombrado juez. Después de dos años de concejal y habiendo votado a favor en el Concejo todo lo que llegaba del oficialismo, el mentado premio nunca llegó. Hace unos meses empezó a reclamar sus pretensiones pero, a esa altura, Tagliaferro ya no le atendía ni el teléfono.

Canario Soto espero el momento. Con su líder malherido aprovechó la derrota peronista y a tres semanas de las elecciones, rompe el bloque. “No estoy de acuerdo con la mentira, ni con la entrega de dádivas por votos, ni con la malversación de los recursos del estado” dice la nota enviada a la presidente del HCD, Analía Zappulla. “El agua de los escándalos institucionales de esta gestión ha llegado  a borde del rio.  No voy a convalidar este cumulo de mentiras con las que se pretende defraudar el partido de Morón”.

Y sigue. “Las prácticas abusivas y extorsivas a las que nos han querido acostumbrar han destrozado los reglamentos, avasallado las garantías y vulnerado todo tipo de procedimiento” dice Canario Soto y le pide al intendente que explique sobre “los oscuros contratos, malversación de fondos, el desabastecimiento del hospital, la violencia ejercida contra los trabajadores, la captación de votos a través de prebendas electorales”.

A RIO REVUELTO

Pero no solo Canario Soto se aprovechó del maltrecho Tagliaferro. También los concejales de Unidad Ciudadana, FPV y FR aprovecharon la volada y en una nota manifestaron “su preocupación y repudio  ante las denuncias de trabajadores que están obligados a difundir la candidatura del intendente Tagliaferro, en su horario laboral, bajo amenaza de perder el empleo”. Seguido, la arquitecta Cristina Bande fue la primera en oficializar la denuncia de aprietes. “En el día de hoy se me informó que debo permanecer en una mesa instalada en la plaza Gral. San Martín vinculada, no a la gestión de mi área de trabajo, sino a la propaganda  vinculada a la reelección de la actual gestión. No estoy obligada de ninguna manera a tomar parte en la actividad política” dice la profesional en su carta de renuncia. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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