De cara al 2021, Vidal, Larreta y la UCR ya toman distancia de Macri

Fuentes cercanas al actual presidente aseguraron que Macri estaría pensando volver a Boca Juniors, con elecciones próximas en puerta, y desentenderse un tanto de la vida política nacional. Sugieren que no le seduce mucho jugar de outsider, desde el llano, cuando en Boca podría tener un protagonismo ejecutivo.

Sin embargo, Macri ya empieza a experimentar la dilución de su liderazgo. Horacio Rodríguez Larreta sabe que deberá “matar al padre” si quiere tener futuro político, ya que no tiene reelección en la CABA y sólo le queda aspirar a la presidencia en 2021. La continuidad del protagonismo del actual presidente sería un estorbo para este proyecto.

Desde la UCR existen dudas respecto de la continuidad de su permanencia en Juntos por el Cambio, pero, aún en caso de quedarse, están decididos a disputar el liderazgo. Tal es la apuesta de Alfredo Cornejo, titular de la UCR, que aparece como un atractivo líder para encabezar una oposición democrática. Justamente Cornejo, Martín Lousteau y “Coty” Nosiglia –el poder invisible dentro de la UCR- han pautado una próxima reunión para definir una estrategia de reposicionamiento del radicalismo, y no descartan una ruptura con Cambiemos para “reperfilar” al partido con miras a las elecciones de 2021, y encabezar una coalición opositora en 2023.

Tampoco María Eugenia Vidal está dispuesta a permanecer en un segundo plano. Por esta razón, este martes reunió en sus oficinas de Retiro a sus diputados, para reagrupar a su tropa y comenzar a definir su estrategia legislativa provincial para el año próximo.

En la reunión hubo algunas ausencias significativas, como las del presidente actual del bloque, el radical Maximiliano Abad, Fernando Pérez y un hombre de Emilio Monzó, Guillermo Bardón.

El faltazo que hizo más ruido fue el de Abad, quien encabezó la lista de Diputados por la quinta sección. La ausencia se debió a una disputa de poder interna entre radicales y vidalistas, en desacuerdo con la decisión de la gobernadora de escoger a Alex Campbell para presidir la Cámara de Diputados provincial en caso de una eventual reelección, que no sucedió.

Campbell es muy resistido por los diputados “rasos”, sobre todo provenientes de la UCR, y las tensiones se profundizaron este martes cuando Campbell se sentó a la derecha de Vidal, convalidando su condición de elegido.

Lo que llamó la atención es la decisión de Vidal de encargarse personalmente de la convocatoria, en lugar de delegarla en otros funcionarios, a diferencia de lo que ocurría hasta ahora. Vidal no fue demasiado explícita sobre su proyecto, y más que nada utilizó esta reunión para comprobar su capacidad de convocatoria. Si bien la asistencia fue significativa, quedó en claro que tanto el radicalismo como los legisladores que responden a los intendentes están en pleno proceso de reacomodamiento, y no dieron precisiones sobre su aceptación del liderazgo futuro de la actual gobernadora. 

Por un lado, el intendente Gustavo Posse (San Isidro) intenta nuclear a un grupo de diputados del radicalismo para crear un espacio propio y comisionó a Walter Carusso para sumar a los diputados que responden a Jorge Macri. También apunta a incorporar a Fernando Pérez –quien se postuló como candidato a la intendencia de Quilmes en la lista de Roberto Lavagna- y a Santiago Passaglia.

La apuesta de Posse confronta con la de Vidal, que pretende articular también un bloque sólido propio, no peronista, que nuclee a sus propios legisladores, el Pro, radicales y Coalición Cívica.

En la próxima Legislatura, de confirmarse los resultados del escrutinio provisorio, el oficialismo de Kicillof - Magario contará con la primera mayoría (46 diputados), en bloque único o tal vez repartidos en tres: Unidad Ciudadana, peronismo y Frente Renovador. Vidal aspira a sumar un bloque propio con los 44 restantes, aunque en su entorno consideran que este objetivo será inalcanzable. De hecho, ya ha tomado distancia Mario Giaccobe, y se anticipa la creación de varios monobloques que acordarán con las nuevas autoridades.

Por ahora, las miradas están puestas en la reunión de la Cámara de Diputados provincial de la semana próxima, luego de varios meses de la clausura legislativa que caracterizó al último tramo preelectoral de las gestiones de Cambiemos en Nación y la PBA. Allí se espera avizorar los primeros reacomodamientos, previos al recambio legislativo que se producirá el 10 de diciembre. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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