La causa feminista y el hambre, las materias pendientes de Alberto Fernández

En términos similares se refirieron Héctor Daer (CGT), José Ignacio de Mendiguren, Miguel Acevedo (UIA), Leo Bilanski (Asociación de Empresarios Nacionales / ENAC) y Marcelo Fernández (CGE/RA), entre otros, destacándose la pretensión de construir “consensos de largo plazo, que vayan más allá de un período presidencial y que incluyan metas compartidas y posibles de alcanzar en distintas etapas”.

Muchos se preguntaron si tanto frenesí era justificado, habida cuenta de que las cuatro organizaciones rurales que componen la Mesa de Enlace pegaron el faltazo, por “no haber recibido el documento con la suficiente antelación”. O al menos esa fue la excusa. Políticamente era muy difícil que pudieran concurrir en medio de un tractorazo que sostenía exactamente lo contrario. Este sábado, Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), trató de calmar las aguas y afirmó que su organización “comparte el espíritu y va a participar” de la mesa de diálogo. Tal vez no le resulte tan sencillo.

Lo que sorprendió, en cambio, fue la publicación en su cuenta de Twitter de la secretaria Legal y Técnica de la presidencia, Vilma Ibarra, quien criticó de manera furibunda el encuentro por la escasísima participación de las mujeres.  

“Para poner a la Argentina de pie somos imprescindibles las mujeres. Las distintas representaciones de la sociedad deben asumir que las mujeres somos una enorme parte del trabajo argentino, de la creación, del esfuerzo, de la solidaridad y también de las soluciones #EsConTodas”, protestó, y adjuntó a la publicación una foto del encuentro, en que apenas se percibe alguna cabeza femenina. 

La crítica frontal de Vilma Ibarra causó cierto revuelo interno dentro del Frente de Todos por diversas razones. Una de ellas, por ser la encargada de cuidar la firma del presidente. Pero claramente ésa no es la razón más importante. 

El reclamo de la secretaria Legal y Técnica es compartida por la mayoría de las mujeres de la gestión, que recuerdan el compromiso de “subirse a la ola” del feminismo que repitió Alberto Fernández durante su campaña. 

Tales impugnaciones se suman al malhumor imperante en comedores y merenderos, y las fundaciones y asociaciones que los patrocinan, por la marginación a la que los ha sometido Victoria Tolosa Paz, la titular del programa Argentina sin Hambre. Le reprochan que las convocatorias apunten a famosos del espectáculo –como Marcelo Tinelli, Narda Lepes o Alberto Cormillot- o al empresario macrista Marcelo Mindlin (presidente del Grupo Emes y de Pampa Energía SA), totalmente ajenos a la problemática del combate contra el hambre en Argentina, mientras que ellos son excluidos y ni siquiera se les responden sus solicitudes de audiencias. 

La mayoría considera errónea la elección de la esposa de Enrique “Pepe" Albistur para comandar esta área estratégica de la gestión de Alberto Fernández, no sólo por su falta de experticia sino también por su particular estilo, situado en las antípodas de los humildes y excluidos a los que, claramente, debería comprender para poder ayudar. (www.REALPOLITIK.com.ar)

¿Qué te parece esta nota?

COMENTÁ / VER COMENTARIOS