Malestar en la Policía Bonaerense por la disolución de áreas sensibles y el traspaso de la caja de retiro

El polémico decreto que puso en estado de alerta a todo el personal policial reza lo siguiente: “Que la constitución de la provincia de Buenos Aires establece que el despacho de los negocios administrativos de la provincia estará a cargo de dos o más ministros secretarios, y una ley especial deslindará los ramos y las funciones adscriptas al despacho de cada uno de los ministerio, la ley 15.164 determina que el poder ejecutivo es asistido en sus funciones por las/los ministras/os secretarias/os, de acuerdo con las facultades y responsabilidades que ella les confiere, asimismo prevé la potestad del gobernador de aprobar las estructuras organizativas y funciones específicas correspondientes a las mismas; como consecuencia de ello, resulta necesario determinar la estructura organizativa del ministerio de Seguridad, en un todo de acuerdo con los principios de austeridad, eficiencia y optimización de la administración pública”.

En su artículo 2 determina para la estructura orgánico funcional aprobada en el artículo precedente los siguientes cargos: un responsable de la Unidad de Coordinación de Políticas de Seguridad con rango de subsecretario, un subsecretario de Coordinación Territorial para el Fortalecimiento de la Seguridad, un subsecretario de Planificación e Inteligencia Criminal, un subsecretario de Coordinación y Logística Operativa, un subsecretario de Participación Ciudadana, un subsecretario Técnico, Administrativo y Legal, un subsecretario de Emergencias, un subsecretario de Formación y Desarrollo Profesional, un responsable de la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (APreViDe) con rango y remuneración equivalente a subsecretario, un auditor General de Asuntos Internos con rango y remuneración equivalente a subsecretario, un director provincial de Articulación con el Poder Judicial y el Ministerio Público, un director provincial de Policía Comunal y Prevención Local, un director provincial de Registro de Personas Desaparecidas, un director provincial para la Gestión de la Seguridad Privada, un director provincial de Planificación Estratégica, un director provincial de Investigaciones y Análisis Crimina, y así sucesivamente con la creación de casi 160 puestos políticos de civiles que antes eran ocupados por personal en jefes superior de la fuerza.

En ese marco, un alto oficial jefe de la fuerza le recordó a REALPOLITIK que esta iniciativa ya se experimentó en la policía del tristemente célebre León Arslanian (2004-2007). En cada jefatura departamental había un civil comandando por arriba del oficial en jefe superior, como también un grupo de interventores con línea directa con el ministro: les decían los “doce apóstoles” y en su mayoría eran gendarmes al mando de Pedrozo, un comandante retirado. “Los mirabas mal y te echaban como un perro. Gracias a la ley de Emergencia disponían de un poder arbitrario y faccioso. Pero los vigilantes no son estúpidos, los estudiaron, observaron el resultado de todo esto y se dieron cuenta que la recaudación ilegal era compartida con esta gente, o sea, se prendieron al juego”, contó un agente es estricto off.

Un reconocido estratega de otros tiempos solía decir que “todo hombre tiene su precio, solo falta saber cuál es” y eso los “patas negras” -como apodan a la Bonaerense- lo entienden como nadie. Y, como valor agregado, es la fuerza que más conoce el territorio. En ese sentido, solo basta recordar cuando la ex ministra Nilda Garre envió 5 mil gendarmes al conurbano para subrogar a la Bonaerense: el operativo no dio el resultado esperado, ya que estos no conocían el territorio y los policías los hacían participar como una especie de socios en los hechos de la recaudación ilegal del narcotráfico y cualquier otro delito que se podían tarifar.

REALPOLITIK tuvo acceso a una serie de audios en los que se puede escuchar al comisario mayor a cargo de la departamental Campana explicando que el cuerpo de policía de comando pasaría a depender de las municipalidades, la Policía Local comenzaría a hacer cursos en las escuelas de formación para recibirse de oficiales y se cortarían los extras correspondientes a horas cores y policía adicional.

Otro audio al que tuvo acceso este medio adelanta que estarían disolviendo y restructurando las dependencias de Inteligencia Criminal, Investigaciones y Antinarcóticos; es decir, todas áreas dedicadas a la investigación criminal.

El último dato que trascendió este fin de semana indicaba que la intención de meter la mano en la caja de retiros y pensiones de la policía provincial podría generar serias consecuencias. Según se comenta, estas pasarían al IPS como una especie de jubilación común de los empleados estatales. “Los comisarios aseguran que, si el gobierno avanza con este proyecto, se pudre todo. Es el único bastión que le queda a la policía. Que vayan trayendo a todos los gendarmes, porque la provincia entraría en llamas”, comentó una fuente a REALPOLITIK.

Por lo pronto, lo que en la jerga se conoce como la “perrada”, es decir suboficiales y oficiales subalternos, se encuentra en estado de alerta y movilización. La duda, por lo pronto, radica en el origen de esta iniciativa: ¿Habrá sido una idea de Sergio Berni o bien un proyecto de Axel Kicillof en miras de aumentar la recaudación para hacerle frente al pago de la deuda? Mientras tanto, lo único cierto es el enojo de los policías para con el ejecutivo bonaerense y el poco prometedor antecedente del suspendido aumento a los docentes.

Por último, un director de Contraoperaciones de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) deslizó a este medio que estas maniobras responden a operaciones del macrismo, “principalmente de gente muy cercana a Patricia Bullrich y Gerardo Milman”. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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