Polémica por las condiciones de los 4.500 pases a planta prometidos por Axel Kicillof

Durante los últimos meses del 2019, el gobierno de María Eugenia Vidal dejó sorpresivamente sin efecto el pase a planta permanente de algo más de 4 mil trabajadores bonaerenses. La situación de los mismos hasta el momento era de franca precarización, dado que había una enorme cantidad de contratados que, desafiando las propias leyes laborales, no habían pasado nunca a la estructura del estado a pesar de que llevaban más de cuatro años en el puesto.

Funcionarios de la ex gobernadora afirmaron, en noviembre último, que el “cajoneo” tenía que ver con una cuestión de prolijidad, dejando el trámite para el gobierno entrante. En los pasillos de la gobernación, sin embargo, se interpretó como una vendetta hacia los trabajadores que no la votaron en agosto y octubre.

Durante la primera reunión paritaria llevada a cabo entre Kicillof y los representantes de diferentes gremios, el gobernador aseguró que abriría las paritarias y que, además, pasaría a planta permanente a unos 4.500 trabajadores precarizados. Además, garantizó la continuidad de los contratos que se vencen en marzo.

Aún en etapas de concreción, el pase despertó polémica entre los dirigentes sindicales. Si bien fue mayormente interpretado como “positivo” y como “un gesto político de apoyo al reclamo de los trabajadores”, inmediatamente comenzó a circular la información de que una de las condiciones que pondría la provincia sería la renuncia voluntaria a la antigüedad. Esto impactaría directamente en las jubilaciones y el poder adquisitivo de los afectados.

Por otro lado, ninguna autoridad bonaerense habría planteado la continuación de ésta política, por lo que sólo se resolvería la situación de unos 4.500 de más de 11 mil trabajadores en esta situación. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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