Choferes de colectivos no cobran y denuncian la falta de representación de la UTA

REALPOLITIK habló con los choferes, que aseguraron que “los delegados defienden a la empresa”. “La pandemia les vino como anillo al dedo para decirnos que no es momento de reclamar y en realidad es que hay acuerdos entre ellos y la empresa, negociados. Desde antes de la pandemia veníamos cobrando en cuotas. Hemos perdido beneficios, falta de descanso, horas extras, francos, pero el gremio hace la vista gorda”, relataron.

Chevallier pertenece al Grupo Flechabus, que nuclea las firmas Tata, Sierra de Córdoba, Empresa Argentina, Urquiza, entre otras que recorren el país. Tienen cabecera en la provincia de Buenos Aires y también en el interior de todo el territorio argentino.

“Nos deben el sueldo completo de abril, lo de marzo lo pagaron en seis cuotas. No tenemos dónde llamar para ver si están bien liquidados porque no tenés un recibo. Estamos a la deriva, llamás a los delegados y no te contestan, y si te atienden le avisan a la empresa porque se cubren entre ellos. El gremio (UTA) los avala”, se quejaron.

Los trabajadores, como informaron, debían recibir el 75 por ciento del sueldo que abonaba el gobierno y el 25 restante de la empresa, pero no cobraron ninguna de las dos partes. “No tenemos un peso, estamos a la deriva”, aseveraron.

El grupo es Flechabus es un monopolio del transporte público de larga y media distancia. Tiene 47 empresas, con las cuales realizan el mismo modus operandi: “La funden, hacen cambios de servicio y horario, días. Se manejan a su antojo. Si se nos ocurre hacer paro, llaman a la otra empresa que también es de ellos y el servicio no se corta, pero muy pocos saben lo que estamos viviendo los trabajadores”, relataron y aseguraron que, ni al gremio ni al empresariado, “les conviene que esto salga a la luz”. “A mucha gente la tienen amenazada, se manejan a nivel mafia. Queremos denunciar que el gremio no nos representa”, completaron.

Por otra parte, un audio al que tuvo acceso este medio expone la posición del cuerpo de delegados que les piden a los trabajadores que se “tranquilicen y reflexionen”.

El que habla es Daniel Dorazio. “A todos nos faltan cosas” pero “no hay que hacer cosas que estén mal. Nos están debiendo plata y eso va a ser una parte. No va a llenar el bolsillo de nadie”, dice el delegado sobre un bono de 5.000 pesos que iban a recibir los trabajadores.

“Para lo que están convocando de nuestros compañeros, nosotros no estamos en condiciones de hacer eso”, desliza Dorazio, sindicado como el más estrecho dialoguista con la empresa. “Saben que somos democráticos y no es la primera vez que se convocan solos pero hoy no podemos confundirnos”, insiste en el audio que llegó al teléfono de todos los trabajadores. “Para los que dicen que estamos bien y ustedes están mal, es un error”, aclara -es que, como denunciaron los choferes, algunos delegados “llegan con autos de alta gama a hablarnos y nosotros no tenemos ni plata para la comida”-.

“Eso (la buena vida de los delegados) no es para hablar por este medio. Estamos doloridos por todo lo que está pasando. Podemos discutir puertas adentro, pero puertas adentro eh. No afuera”, advierte. “No entren en desesperación. Un abrazo de todos los delegados. Hay que estar unidos porque es la única manera de salir” cierra Dorazio, aunque poco convincente. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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