Reestructurar el gobierno chaqueño

Al analizar la multiplicidad de factores intervinientes en nuestra provincia del Chaco, vemos desinteligencias factibles de ordenarse, aunque para ello -y con el fin de coordinar una linea de acción- tuvo que intervenir el gobierno nacional en colaboración de funcionarios provinciales para atacar con mayor efectividad el avance del contagio comunitario. 

Coincido plenamente con Jorge Capitanich en la idea de que sus funcionarios provinciales son jóvenes e inexpertos para actuar en estas circunstancias. Al señor gobernador le digo, ante esta emergencia, que se pueden corregir las medidas que pudieron ser desarcetadas. Para ello, en lo inmediato, debe plantearse la reestructuración del gobierno provincial y, en consecuencia, gran parte del programa de gobierno propuesto como Plan 2030, ya que está descalificado por la emergencia del COVID-19, dado el condicionamiento de la inevitable economía coyuntural y post pandémica. 

La intermultiplicidad de factores que intervienen para consensuar los intereses de los sectores salud, educación, economía, empresarios, comerciantes e industriales ante las medidas de resguardo social en que nos encontramos deben ser consensuada con los gobiernos nacional y provinciales, porque no somos una isla en el contexto de provincias argentinas.

Abrazo la causa nacional y popular del peronismo. Como militante político es mi deber observar, transmitir y reclamar la 

reestructuración de las pautas políticas y de acción de gobierno, como plantea nuestro presidente Alberto Fernandez, y crear las condiciones para la justicia social, soberanía política e independencia económica.

(*) Jorge Coco Alfonso, es un referente político y social del Chaco.

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