La industria de la pirotecnia busca sobrevivir al “cambio cultural”

En ese marco, explicó que “más que hacer una reinvención estamos sacando algunos productos de los que principalmente teníamos quejas, los de alto impacto sonoro, de estruendo. Entendemos también que es un cambio cultural, nosotros lo tomamos como que la actividad tenía que hacer una evolución”. 

Además, señaló que “el Sindicato nuestro es nuevo, tiene un año y tres meses y desde el primer día sabíamos que el camino era este, empezar a transformar, sacar algunos productos de la venta, que son los menos, los que hacen alto impacto sonoro o estruendo que no son necesarios y aparte ya los chicos no los consumen”, comentó. 

“Hace unos años atrás el que hacía más ruido en la cuadra era la atracción del barrio, iban todos a verlo y hoy ya eso cambió, hoy se opta más por el tema de las luces y aparte cuidando aquellas personas que sufren hipersensibilidad auditiva como son los chicos con el trastorno del espectro autista, bebés adultos mayores”, argumentó.

El sindicalista dijo que en forma directa o indirecta en el sector trabajan 50 mil personas a nivel nacional porque los kioscos también están habilitados a vender fuegos artificiales de hasta treinta bultos.

LA MALA PRENSA

Por otra parte, Cantatore cuestionó: “Lo de la mala prensa se lo aceptamos a los papás de chiquitos con autismo, a proteccionistas. A los políticos que prohíben una actividad, nosotros les decimos que esa es la fácil: después tenés las consecuencias de la venta clandestina online”.

“La regulación en un municipio implica un poco más de trabajo porque no te sirve de nada poner ‘pirotecnia cero’ y después no controlar que se cumpla eso que vos estás diciendo, aparte que es inconstitucional porque la actividad nuestra es lícita, los productos son todos legales pero tomamos la decisión nosotros de sacar del mercado a los de alto impacto y de estruendo”, agregó.

“Lo que si pedimos en la campaña ‘Más luces, menos ruido’ es la venta de productos de bajo impacto sonoro, que sea con un sonido tolerable, ambiente, cotidiano porque a la hora de evaluar los problemas auditivos, la contaminación auditiva tenemos que hablar no sólo de los fuegos artificiales sino de un montón de cosas de la vida cotidiana, el transporte y un montón de situaciones”, destacó.

El sindicalista consideró que “el cambio se tendría que haber hecho hace años, pero damos gracias a que lo hicimos y ya esté funcionando”. También se mostró con expectativas por el movimiento en las ventas: “Prácticamente los precios variaron, pero muy poco, se trajo muy poco porque queda lo del año anterior. El tema económico hizo que ya desde el año 2016 merme un poco la compra de fuegos artificiales, este año creo que se van a utilizar porque la gente tiene ganas de que se vaya el 2020”.

Por último, sugirió a los consumidores que compren en lugares habilitados y de marca: “Que los chicos en lo posible sean espectadores nada más, salvo los productos para ellos, pero hay que tener también responsabilidad por parte de los adultos”, cerró. (www.REALPOLITIK.com.ar)

*La entrevista se realizó en el marco del programa Rendición de Cuentas que se transmite de lunes a viernes de 12 a 14 por RADIO REALPOLITIK.

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