ABSA hace agua: Crecen los reclamos y la necesidad de una intervención

Distintas localidades de la provincia de Buenos Aires continúan con falta de agua, poca presión y roturas de caños que inundan sus calles y, a pesar de contar con decenas de reclamos desde hace meses, la empresa Aguas Bonaerenses SA (ABSA) hasta el momento continúa sin dar respuesta.

El actual presidente ejecutivo de la empresa es Germán Ciucci, quien asumió pocas semanas después de la llegada de Axel Kiciloff a la gobernación de la provincia de Buenos Aires. A pesar de su experiencia probada en empresas públicas y tarifas, hasta el momento su magro desempeño al frente de la empresa le valió pocos cambios en el deficiente servicio que la misma ofrece desde hace varios años.

A pesar de las manifestaciones de Ciucci pocos días después de asumir, cuando aseguró que trabajará “muy duro para mejorar la calidad de vida de la gente”, los reclamos por el defectuoso servicio de ABSA no han hecho más que aumentar.

Entre todos los casos de problemas de agua de la provincia de Buenos Aires, que se cuentan por centenas, se destaca el del barrio Universitario de Bahía Blanca, en donde los vecinos deben levantarse a las 5.00 para poder bañarse y lavar la ropa, dado que a partir de esa hora ya no cuentan con el servicio de agua. En total, sólo en Bahía Blanca, son más de 32 barrios los que se unieron para protestar contra la mansedumbre de las autoridades de ABSA.

En la ciudad de La Plata, por ejemplo, los reclamos han sido más de mil y motivaron un pedido de intervención a la empresa dentro del Concejo Deliberante local. Los problemas, en algunos casos, llevan más de una década y abarcan amplias zonas de la ciudad, principalmente City Bell, Tolosa y el caso céntrico. Por ejemplo, en la zona del parque San Martín, un vecino llevó adelante 23 reclamos durante un año entero para que reparen un caño que pierde centenares de litros de agua diarios y ya levantó parte de su vereda. Al día de la fecha, no se presentó nadie a repararlo.

A pesar de haber asegurado que encontró una empresa devastada operativamente y con una deuda de 1.000 millones de pesos, Ciucci pareciera ser en la práctica una continuación de la gestión de Raffaele Sardella. Tanto, que a su llegada decidió mantener en el cargo a Sebastián Aprea, director Comercial durante los años de Vidal; y a quien promovió al cargo de jefe de Control de Gestión; Jorge Luppo, a cargo de la prensa y a Gastón Cima Berreta, como jefe de Administración. A un año de asumir Ciucci, pareciera que poco y nada ha cambiado en ABSA. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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