EDLP: Los exorbitantes sueldos de los amigos de Verón crean malestar dentro de un club sin paritarias

Como se sabe, Agustín Alayes llegó al pincha hace unos ocho años, en tiempos en los que Enrique Lombardi comandaba la institución albirroja. Su desembarco fue posible gracias a sus vínculos con Juan Sebastián Verón, quien por ese entonces ostentaba el cargo de director Deportivo. A los seis meses de asumir, con Mauricio Pellegrino de DT, la “Brujita” volvió a jugar al fútbol y Alayes quedó al frente del departamento de Fútbol Rentado.

A los dos años, Verón asumió como presidente del club, ganándole las elecciones a la fórmula Lombardi - Bilardo. Alayes, a pesar de ser una persona rentada del club, decidió jugar políticamente a favor de su amigo. Desde entonces, continúa ocupando el cargo de director Deportivo.

En ese marco, puede afirmarse que la gestión de Alayes no está exenta de polémicas ya que, desde que está en el club, se trajeron más de 120 jugadores y pasaron más de 8 directores técnicos: Pellegrino, Gabriel Milito, Nelson Vivas, Lucas Nardi (que ni siquiera llegó a asumir por el descontento de la gente que se movilizó a la sede), Gustavo Matosas, Lucas Bernardi, Leandro Benítez, Milito -nuevamente- y Leandro Desábato.

Por su parte, Diego Ronderos llegó al club siendo directivo en los tres años de mandato de Lombardi, en tiempos en los que trabajaba para el gobierno del gobernador bonaerense, Daniel Scioli. Luego, hábilmente saltó a la lista de Verón, donde una vez más fue elegido directivo en los tres primeros años de mandato para posteriormente ser premiado como empleado rentado del club, siendo la mano derecha de Alayes durante la segunda gestión de Verón, ya que se había quedado sin trabajo tras el triunfo electoral de María Eugenia Vidal y Mauricio Macri.

Actualmente este departamento le cuesta a la institución la abultada suma de casi 8 millones de pesos anuales: 400 mil pesos por mes destinados al sueldo de Alayes y 250 mil al de Ronderos.

OTRA POLÉMICA

Marcelo Deluca, gerente del club, llegó al pincha en el primer mandato de Verón, ocupando el puesto de revisor de Cuentas suplente. Luego de renunciar a su cargo como directivo, pasó a asumir la gerencia General del club cobrando un abultado sueldo de 400 mil pesos.

Pero, además, hay otro dato que llama poderosamente la atención en el rol que desempeña Deluca. Se supone que el arduo trabajo en la gerencia del club le debería demandar no menos de ocho o diez horas laborables diarias dentro de la institución, algo imposible de cumplir con su otro trabajo en el ministerio de Hacienda de la provincia de Buenos Aires, donde percibe 70 mil pesos al mes.

El abultado caché de Deluca provoca un silencioso pero profundo malestar entre los directivos que trabajan a la par o más sin percibir un solo centavo por ello. Pero, sobre todo, existe un marcado enojo con el resto de los empleados que en la mayoría de los casos no percibieron ningún tipo de aumento en el año 2020.

“No entendemos cómo hace Deluca para cumplir con ambas ocupaciones: si se divide en dos o no está cumpliendo con alguno de los trabajos”, concluyó un empleado no sin cierto sarcasmo. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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