Fiesta de contratos familiares en el municipio de 25 de Mayo

Aunque esta práctica se replica a lo largo y ancho de la cúpula comunal, los funcionarios que están en la picota son principalmente dos: el secretario de Gobierno, Nicolás Lorenzo, quien en la práctica es el intendente en las sombras; y el concejal camporista, Silvio Rafael Almirón, quien viene de militar en las filas del Frente Renovador de Sergio Massa.

Nicolás Lorenzo y María José Zarza, con sus dos hijos Agustín y Juana.

Actualmente Nicolás Lorenzo percibe un sueldo de 101 mil pesos como titular del área de Gobierno. Pero no es el único familiar que lleva el pan a la casa gracias a un contrato municipal: su esposa María José Zarza ocupa el cargo de directora de Enlace Legislativo; como tal, depende política e institucionalmente de su esposo y cobra unos 59 mil pesos mensuales.

Pero los hijos de la pareja también viven del estado. Tanto Juana Lorenzo, quien consiguió su primer trabajo en el municipio gracias a la bonhomía de su padre, como Agustín Lorenzo, quien ingresó recientemente a la sede del IOMA, también tienen asegurado un sueldo a fin de mes.

Sin embargo, el caso de Juana Lorenzo es sin dudas el más llamativo: aunque cumple una carga horaria de seis horas dentro del municipio, también tiene tiempo para desempeñar tareas en Parque Pampa SA Tromen, la empresa que manejan Mario Esteban Remondino (de Moreno), Francisco Álvarez (de Moreno), Mariano Gabriel Remondino (de Villa Ballester) y Patricio Jaime Chababo (de Nordelta).

El concejal Silvio Almirón junto a su esposa e hijos.

Como dijimos más arriba, sin dudas, el otro caso paradigmático de nepotismo en 25 de Mayo lo encabeza el concejal de La Cámpora, Silvio Rafael Almirón, quien actualmente cobra por su rol dentro del Concejo Deliberante unos 43 mil pesos por mes.

Su esposa, María Cáceres, desempeñaría tareas en el Centro de Prevención de las Adicciones de la municipalidad. Lo mismo ocurre con su hermana, Patricia Almirón Riguccini, quien trabajaría en el área de Tesorería, y su otro hermano, Esteban Carlos Vera.

Por suerte para el concejal K, ninguna de sus dos hijas tiene que preocuparse por llegar a fin de mes. Tanto Ángeles como Patricia vienen de trabajar juntas en Protección Ciudadana. Lo burdo de que dos familiares de un concejal desempeñen tareas en la misma área, llevó a que recientemente las deriven a otros lugares.

Hoy, Ángeles trabaja en la secretaría de Educación y Patricia en el sector de Compras. Gracias a la unidad familiar, Silvio Almirón se asegura de tener acceso a prácticamente todos los rincones del poder institucional. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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