La infraestructura escolar, víctima de la falta de criterio de Kicillof

La situación de la educación de la provincia de Buenos Aires y los gestos que, últimamente, realizó la gestión de Axel Kicillof hacia ese sector fueron de algún modo decepcionantes. Numerosos directivos, en efecto, comenzaron a comunicarse con el objetivo de llevar adelante algún tipo de acción mancomunada que exija respuestas definitivas por parte del gobernador.

Actualmente, se calcula que cerca de un 30 por ciento de las escuelas de la provincia de Buenos Aires no han podido retomar las clases presenciales por falta de calefacción o mantenimientos generales, que incluyen la limpieza de espacios en estado de abandono y hasta casos de infestaciones de roedores.

En este contexto, desde la gobernación se dio aval para que la Universidad Provincia del Sudoeste (UPSO) se lance a un gasto de 700 mil pesos para la limpieza de la delegación administrativa de la casa de estudios en Bahía Blanca. Paradójicamente, a diferencia de las escuelas que necesitan reiniciar la presencialidad y aún no logran hacerlo por falta de presupuesto, según los propios alumnos y las comunicaciones oficiales de la universidad en el sitio web, prácticamente toda la actividad es virtual.

Se trata de la misma casa de estudios que en marzo del 2020, pocos días antes del comienzo de la cuarentena impuesta por el gobierno de Alberto Fernández, solicitó y obtuvo del gobierno de Kicillof un presupuesto de 2.462.428 pesos para gastar en remises para sus directivos.

La directora General de Cultura y Educación de Buenos Aires, Agustina Vila, expone, una vez más, una grave falta de criterio. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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