Militante detenido teme por su integridad física a manos de la policía del gobernador Valdés

Si bien todo comenzó por un desalojo que finalmente se perpetuó, lo cierto es que las instituciones correntinas “vienen persiguiendo” al militante Guillermo Galantini “desde hace años”. Así lo señalan sus compañeros de militancia en diálogo con REALPOLITIK, quienes ejemplificaron con un episodio ocurrido en agosto del 2017, cuando el por entonces candidato a la intendencia de Monte Caseros fue detenido “arbitrariamente” por 36 horas al haber sido denunciado por Cambiemos de pintar una pared en el Concejo Deliberante local.

De este modo, aclararon que el “atropello institucional” contra Galantini es “sistemático”, pero más allá de personificar en el dirigente, destacaron que el “abuso policial” de la policía correntina está “naturalizado”, a punto tal de “entrar a casas sin los allanamientos correspondientes”. Retomando el momento de tensión que se suscitó con el desalojo de un campo en Paso Vallejos, vale resaltar que la feroz represión por parte de las fuerzas de seguridad se desató tras el corte de ruta de las organizaciones sociales presentes, que no lograron impedir que se efectivice la orden judicial.

Posteriormente, el fiscal López Ruiz ordenó la detención del militante de la CODEJU y luego de su concreción, los movimientos sociales acudieron a la comisaría primera para repudiar el accionar policial y exigir la liberación de los cuatro detenidos alojados en la alcaidía de Monte Caseros. Actualmente, Galantini se encuentra en la Unidad Regional de Curuzú Cuatiá donde fue trasladado para preservar su integridad teniendo en cuenta “los hechos ocurridos con los agentes policiales, la posibilidad de entorpecimiento de la investigación, mejores condiciones de detención, y la paz social ante las manifestaciones frente a la comisaría”, según consignó un medio local.

Por otra parte, los familiares del dirigente dialogaron con el representante de la comisión Contra la Tortura de la provincia de Corrientes, Julio Fagalde, quien visitó al detenido e informó de sus “golpes en la espalda, la cabeza y un ojo”. Igualmente, sostuvo que “lo vio bien y entero”, a la par que “agradeció el acompañamiento de todos los compañeros”. No obstante, estos últimos están movilizándose en conjunto con los abogados del PJ para brindarle “contención” a Galantini, tal como declararon en conversación con este medio.

El miedo de otro hostigamiento violento de las fuerzas de seguridad del gobernador Gustavo Valdés contra el ex candidato a la intendencia de Monte Caseros es tal, que sus familiares han manifestado su “extrema preocupación” tras la detención post desalojo. Así lo evidenciaron en un comunicado: “Guillermo fue arrestado por la policía, brutalmente golpeado, herido en la cabeza, la panza, la cara y llevado detenido. Luego la policía lo mantuvo incomunicado por más de 24 horas, un hecho totalmente ilegal, y ante nuestro reclamo la policía nos dijo que iba a ser llevado al hospital de Monte Caseros, sin embargo, nunca llegó. La policía nos oculta donde lo tienen”.

“Todo este procedimiento ilegal y de abuso de la fuerza policial atenta con los derechos humanos de forma directa poniendo en juego la vida de Guillermo y ocultando su delicado estado de salud producto de las heridas que la misma policía le provocó”, continuaron. Y concluyeron solicitando a todas las organizaciones de derechos humanos que “nos ayuden en esta lucha para hacer aparecer con vida a Guillermo y que se castigue y se termine la impunidad y el abuso de poder de la policía de Corrientes”. Más allá que actualmente, después de la presión social, se conoce el paradero de Galantini, aún se teme que el imputado vuelva a sufrir un nuevo trato discrecional en detrimento de su integridad física. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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