“No renegociar la deuda significaba ponerle freno a una economía que viene creciendo muy fuerte”

"Este gobierno lo que está haciendo es refinanciar la deuda del 2018 que en este año significaba 20.000 millones de dólares y otros 20.000 millones el año que viene que a todas luces es imposible", empezó el economista Leonardo Anzalone.

El director del Centro de Estudios Políticos y Económicos (CEPEC) afirmó: "La negociación del gobierno con el Fondo lo que hace es patear los pagos de acá a cuatro años y medio y, en vez de que esa deuda quede toda apretada en dos años, se va a empezar a pagar en el 2023 y se va a terminar de pagar en el 2034. Eso es a grandes rasgos lo que el poder legislativo autorizó mediante la ley al poder ejecutivo".

Entre los puntos preponderantes, Anzalone señaló: "En principio, lo más importante es que se evita el default que no es técnicamente así, pero para que se entienda. Esa situación de no pago al FMI nos iba a llevar a un escenario desconocido por lo malo, porque positivo no iba a haber nada si no le pagamos al Fondo", opinó. Y sostuvo que "si en este año no se transferían los fondos íbamos a hablar de un dólar que uno no podía saber a dónde se iba a ir y eso se traduciría en más inflación, más pobreza".

En este sentido, reiteró en la misma línea que "no renegociar esta deuda significaba ponerle freno a una economía argentina que viene creciendo muy fuerte". "El año pasado se creció más del 10 por ciento, recuperando todo lo perdido en la pandemia y siendo una de las economías que se recuperó más rápido en todo el mundo", describió. 

Para concluir sobre este primer aspecto positivo, cerró: "Lamentablemente, hubo que negociar con el Fondo Monetario la deuda que tomó Mauricio Macri, pero se evita un escenario desconocido".

Más allá de la no caída en default, el economista marcó que "lo positivo es que se garantizan cosas muy importantes como que el gasto en los sectores vulnerables siga creciendo porque ahí es donde tiene que estar el estado". "Otra cosa importante que se garantiza con el acuerdo es que efectivamente se duplique el gasto en infraestructura y esto significa que va a seguir aumentando la obra pública, la construcción que genera empleo de forma rápida y continúa empujando la economía. Me parece que estos dos puntos son dos factores determinantes y que van a dar resultados en el corto plazo", añadió.

"Desde los sectores de la oposición se exageraron las posturas y se apeló a lo que dijo ayer el presidente que pidió que le expliquen dónde está el ajuste y que dijo que si alguien encuentra que partida del gasto se ajusta hablarían", comentó. "Lo único que puede sonar a ajuste es el tema de las tarifas que van aumentar menos que el resto de los precios de la economía, menos que los salarios", concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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