Nuevos datos reavivan el OlivosGate: Vuelos ocultos, depiladoras y más fiestas

Los registros obtenidos por la ONG Poder Ciudadano en el año 2021, que muestran en detalle las entradas y salidas de la Quinta de Olivos durante la pandemia que asoló al país durante algo más de dos años, destaparon un escándalo que aún resuena en los pasillos de la Casa Rosada.

Nuevos detalles parecieran agregar leña a un fuego que alimentó el quiebre interno en el Frente de Todos. De acuerdo a los registros, entre el 15 de marzo de 2020 y el 15 de junio de 2021, mientras el país se aislaba y se evitaban las reuniones de cualquier tipo, incluso las familiares, unas 1.509 personas ingresaron a la Quinta de Olivos.

En poco tiempo, la quinta presidencial se transformó en un extraño bunker utilizado en igual medida para reuniones de trabajo y festejos sociales. En las últimas horas, se conocieron algunas visitas que, hasta el momento, no habían salido a la luz.

Por ejemplo, el 4 de mayo de 2021 ingresó a la Quinta de Olivos la doctora Yamila Chamma, hija del médico César Carlos Chamma, quien es amigo personal del presidente Alberto Fernández y se encontraba próximo a llevar adelante una exposición de sus pinturas amateurs en la Casa Rosada.

Yamila Chamma es una cirujana plástica que se especialista en medicina reconstructiva y reparadora, estética y ortomolecular. En sus publicaciones online, presenta su propuesta de “envejecimiento saludable” y depilación definitiva. De acuerdo a allegados al matrimonio presidencial, Chamma ingresó a la Quinta de Olivos en plena pandemia en su calidad de depiladora de la Primera Dama, Fabiola Yáñez.

El caso de la hermana de la Primera Dama, Tamara Karina Yáñez, y sus ingresos a la Quinta de Olivos reviste otro tipo de misterio. Por alguna razón, Tamara ingresó a la residencia presidencial en varias ocasiones, pero no pareciera existir registro de sus salidas. En coincidencia, su hermana Fabiola Yáñez utilizó durante aquellos días los aviones de la flota aérea presidencial durante 21 veces para ir a Misiones a visitar su familia.

Como suele ocurrir, cada vez que el matrimonio presidencial utiliza un avión oficial, se dirigen al aeropuerto desde la Quinta de Olivos en helicóptero o en vehículos escoltados por patrulleros de la Policía Federal Argentina, por lo que lógicamente no existiría registro alguno de su salida.

Se trata de un curioso mercado de entradas sin registrar, en las que se encuentran la hermana de Fabiola y hasta vale recordar el escrache que sufrió Luis Brandoni, por haber ido allí junto a Adrián Suar y el productor teatral y televisivo Carlos Rottemberg.

En este contexto, dos nuevos hechos sobrevolaron los límites del escándalo. El 30 de abril de 2021, a las 19.55 -apenas cinco minutos del inicio del toque de queda decretado por el presidente Alberto Fernández- ingresó a la Quinta de Olivos Tatiana Pizlo Jezior, quien saltó a la fama por ser amiga de la mediática y autorreconocida “prostituta VIP” Natacha Jaitt. Aún se desconoce el motivo de sus visitas nocturnas a la casa del presidente quien, paradójicamente, solía seguirla en su cuenta de Instagram.

Por otro lado, un supuesto festejo de cumpleaños de Vilma Ibarra en la Quinta de Olivos permaneció aparentemente oculto durante los últimos meses. Ibarra fue pareja de Alberto Fernández durante nueve años, del 2005 al 2014, y es conocido que mantienen una gran amistad.

El 20 de mayo por la noche, tan sólo unas horas antes de su cumpleaños, Ibarra ingresó a la Quinta de Olivos junto a sus tres hijos Mariano, Sebastián y Matías, producto de su matrimonio con Leonardo Lebendiker. Minutos después, y para completar el festejo, llegó el reconocido músico Pedro Aznar. Tan sólo horas después, y cuando el festejo finalizó, el presidente decretó una nueva Fase 1 con todo tipo de restricciones. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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