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8 de julio de 2022 | Cultura

Memorias de una leyenda

Sergio Gramática por seis

Seis definiciones del baterista fundador de Los Violadores antes de la presentación de "Lo hice porque me lo prometí", su flamante autobiografía.

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Juan Provéndola

Este jueves último, el legendario baterista Sergio Gramática estrenó en Strummer Bar de Palermo Gramática-Tapia, su flamante proyecto junto al multitalentoso Lucio Tapia. Es su nueva apuesta después de último gran retorno de Los Violadores, marcado con el show del Luna Park en abril de 2016. 

Pero mientras atiende su presente y mira hacia el futuro, Gramática también se dedica a presentar "Lo hice porque me lo prometí", su reciente autobiografía. Lo hará el sábado 16 de julio en la biblioteca popular Benito Nazar, de Villa Crespo (Antesala 340), junto al periodista y gestor cultural Esteban Cavanna, quien acaba de reeditar una versión aumentada de "Uno, dos, Ultravioleta: La historia de Los Violadores" 

El fundador de Los Testículos y Los Violadores cuenta su propia vida, la de una familia trashumante que se muda más de diez veces por el conurbano bonaerense hasta establecerse en Bernal. Desde allí, Sergio Gramática consumía mensualmente Pelo, la revista en la que vio la célebre carta de Hari B al correo de lectores, mito fundacional del punk argentino. De allí, y durante casi diez años, el baterista transitó todo un arco en la música que acabó con su salida a Violadores, en 1988. 

A partir de ese entonces, comienza una vida completamente distinta a la que los relatos revisionistas sobre la cultura rock recuerdan. Gramática se reinventa en otra dimensión, menos púbica y más íntima, que lo lleva a experimentar unos años en Tijuana (destino que Gustavo Cerati le había sugerido especialmente, no se equivocó) o a averiguar quién era aquella "Tía Ema" de la que su familia hablaba (en efecto, una afamada actriz europea). 

Sergio Gramática presentó "Lo hice porque me lo prometí" por primera vez en diciembre pasado, en el marco de la muestra sobre el rock argentino de la década del '80 en el Museo Histórico Nacional. Aquí van seis extractos de aquella tarde a pocos metros a espaldas de Parque Lezama, donde Buenos Aires se fundó, y del mítico sable corvo de San Martín, entre otras preseas de la historia.

LA VIEJA POLÉMICA POR EL NOMBRE 

"Con el tiempo se armó una polémica acerca de nuestro nombre, pero que nunca tuvo que ver con nuestra intención original. Jamás pensamos en una connotación sexual: estábamos en plena Dictadura, nos metían presos, nuestras letras criticaban lo establecido. Siempre creímos que eso estaba claro, pero por las dudas hicimos "Violadores de la ley", una canción que lo terminó de explicar. Lo grabamos en 1988, para "Mercado indio", aunque el tema ya estaba de 1981, cuando lo probamos a Pil como cantante. Lo habíamos hecho con Stuka y Hari B. En el disco salió con arreglos más puntuales, más finos, pero la estructura es la misma de siempre".

LA ÚNICA VEZ QUE FUERON LOS VIOLADORES

"La única vez que tuvimos que sacar la "I" de Violadores para promocionarnos fue en Mar del Plata. Éramos teloneros de Riff en Canterama. El intendente, cuando vio los afiches, exigió que cambiaran nuestro nombre. Ocurrió en enero de 1983 y, a pesar de lo que se cree, fue la única vez que pasó eso. Los mitos hacen que todo sea grande, parece que pasó 25 veces, pero solo sucedió una".

EVA GRAMÁTICA, LA DESCONOCIDA ESTRELLA EN LA FAMILIA 

"Mi abuelo siempre hablaba de la tía Ema. '¿Quién será Ema?', me preguntaba. Tenía cinco años. Después, con el tiempo, vi que había filmado películas clásicas, como Mirando, mirando. Mi tía y mi viejo la habían visto en el Teatro Astral. Mi abuelo las llevó. Salieron cosas en la prensa. Le decían 'La Trágica', porque hacia cosas dramáticas. Les pregunte a mi tía y a mi viejo si habían guardado recortes, decían que sí pero nunca los encontraban. Hasta que, tiempo después, empecé a buscar por la mía. Y me asombró más de lo que pensaba. Una figura impresionante, actriz de raza. Ser actor, mujer en esa época. ¡Y soltera! Así hasta los 90 años. Además tiene otro mérito: fue quien impulsó a Bernard Show!"

LA VIDA DESPUÉS DE LOS VIOLA

"Hacía diez años que venía tocando: dos con Los Testículos y el resto con Violadores. Fueron cinco discos. Ya era bastante, como demasiado. Ademas había una ruptura interna en la banda. El éxito a algunos les pega de una manera, a otros de otra. Y ya no podía soportar eso. Por mi propia salud, decidí irme. Fue muy cansador lo último. Lo anuncié varios meses antes, cumplí los compromisos que quedaba. Y después... simplemente... seguir viviendo. La cosa sigue..."

LOS RAMONES DE ARGENTINA A PERÚ

"Yo creo que la Argentina adoptó a los Ramones, y no al revés. Porque es algo que va más allá de ellos. Está bien que tocaron acá, y encima muchas veces. Pero son casos que se suelen dar. Chip Treak, por ejemplo, era una banda adoptada en Japón, al punto que ahí teníamos más éxito que en Estados Unidos. Y, salvando naturalmente las distancias, en un momento a nosotros nos pasó algo así en Perú, donde nos iba a ver más gente que en Argentina. Incluso otra similitud que se me ocurre ahora: después de ambos éxitos, Dee Dee vivió en Argentina y Pil en Perú".

CÓMO SE DIO LA VUELTA EN EL LUNA PARK

"Después de Los Violadores me fui unos años a Tijuana y a la vuelta armé Anti Nasti. Grabamos un disco, duró poco. Recién al tiempo hice Bandido, donde sólo cantaba. Estuve mucho tiempo sin tocar la batería. Hasta que en 2011 ví que se cumplían treinta años del primer show de Los Viola, nos estábamos poniendo grandes, jaja. Al primero que llamé fue a Pil. Él ya estaba en Perú. Le dije que necesitaba hablar personalmente sobre algo. Le conté y le interesó, aunque era difícil: Pil estaba en Lima, Stuka en Miami y el Polaco en Europa. Empezamos a contactarnos durante mucho tiempo, aunque nunca los cuatro juntos. Hasta que, finalmente, nos encontramos todos cara a cara en 2015 y dijimos: 'Hagámosla'. Aunque todos teníamos ganas, no se dio de un día para el otro. Hicimos ocho shows y cada cuál tuvo lo suyo, pero el Luna Park fue un gran momento, inolvidable y, por suerte, quedó para siempre en un DVD". (www.REALPOLITIK.com.ar)


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