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8 de agosto de 2022 | Nacionales

A toda máquina

Sergio Massa comienza a darle consistencia a su gestión

En el entorno de Sergio Massa aseguran que duerme apenas cuatro horas por día y que la dinámica de trabajo que desarrolla es arrolladora. La realidad indicará si tanto esfuerzo valió la pena.

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En las últimas horas se confirmó el ingreso de dólares por financiamiento externo, la política de "orden fiscal" que impulsa el nuevo titular del Palacio de Hacienda y los operativos de Aduana en busca de maniobras irregulares de comercio exterior. Diferenciándose claramente de la tendencia sistemática a procrastinar las decisiones, muy propia de Alberto Fernández, Sergio Massa pretende dejar bien en claro el alineamiento entre anuncios y acción.

En efecto, Sergio Massa ha comenzado a dar señales de consistencia desde un principio entre sus propuestas y las acciones concretas que se desarrollan, para tratar de tranquilizar a los mercados que experimentan una profunda vulnerabilidad financiera y cambiaria.

En las últimas horas, el superministro tuvo un fuerte gesto de autoridad al desplazar al secretario de Energía, Darío Martínez, y, sobre todo, al subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, un ultracristinista que se rebeló contra Martín Guzmán e impidió que desarrollara su política en el sector. En reemplazo de Martínez designó a Flavia Royón, quien se desempeñaba como ministra de Energía y Minería de Salta, una provincia gobernada por un dirigente afin al Frente Renovador.

Este lunes, además, se confirmaron avances en tres de los anuncios formulados por Sergio Massa en la conferencia de prensa posterior a su asunción, el miércoles pasado.

En lo referido a la llegada de divisas, la Corporación Andina de Fomento –un banco orientado al desarrollo de América Latina-, confirmó un desembolso de 740 millones de dólares para aplicarlos al área de infraestructura, en particular a la "ampliación y mejora de infraestructura escolar, recuperación y desarrollo de complejos agroexportadores". También se utilizará parte de esos recursos para "apoyo al sistema vial argentino, al plan Argentina contra el Hambre y a la acción ambiental y climática en nuestro país".

Asimismo continúan a toda máquina los operativos de la Administración General de Aduanas (DGA), a cargo de Guillermo Michel, un hombre del riñón de Sergio Massa. Los operativos han conseguido detectar maniobras de subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones, que generaron un gran impacto en la recaudación por impuestos de comercio exterior y además desvíos en el acceso a divisas. 

"Las empresas que se encuentran en observación por subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones son 722, con más de 13 mil operaciones que le generaron al estado un perjuicio de casi 1.000 millones de dólares", notificó la DGA.

Finalmente, el ministerio de Economía anunció que hoy se concretará el reintegro de 10.000 millones de pesos al Banco Central de la República Argentina (BCRA), para comenzar a reducir la deuda que se mantiene con la autoridad monetaria. En su asunción, Massa había anticipado que iniciaría "camino de cancelación que procuraremos continuar". Y pocos días después ya comenzó a transitarlo. 

"Básicamente, lo que vamos a hacer es no pedir más plata de emisión al Banco Central para financiar al Tesoro. Nos vamos a arreglar con los recursos que recaudamos y con financiamiento que podamos conseguir del sector privado", habían sido sus palabras.

Durante este año, el Banco Central le había transferido al Tesoro nacional alrededor de 950.000 millones de pesos en concepto de Adelantos Transitorios, de los cuales se devolvió una parte, 322.449 millones de pesos, al recibir los Derechos Especiales de Giro (DEG) concedidos por el FMI.

De este modo, Sergio Massa comienza a aplicar el axioma romano Res non Verba (hechos, no palabras), para dar consistencia a su gestión. En los primeros días ha conseguido avanzar varios casilleros. (www.REALPOLITIK.com.ar) 


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