Macri criticó el dialoguismo y destacó su preferencia por Jorge Macri en CABA

Si bien elogió a todos, lanzó un manto de duda sobre Horacio Rodríguez Larreta. En materia electoral, no quiso blanquear si él mismo será candidato o no, y presentó a cinco posibles candidatos de su agrado para la provincia de Buenos Aires, y solamente uno para la CABA.

Jugando de local en su canal La Nación + y con su publicista preferido, Luis Majul, como interlocutor, el ex presidente afirmó que sus tres candidatos presidenciales preferidos para Juntos por el Cambio son María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. “En el orden que quieras”, agregó ya que aseguró que no tiene "favoritismo por uno u otro".

“Están muy preparados. Los estoy ayudando a los tres. Los tres están mejor que hace un año", subrayó. Y en seguida aceptó que el mejor posicionado es Rodríguez Larreta, pero que no termina de convencerlo que se perciba “dialoguista”, ya que eso no se traduce en sus acciones. "Horacio está mejor plantado. Lo veo en lo que va a hacer y está mucho más claro y contundente. Más allá de que el pregone que cree en algo muy dialoguista". E inmediatamente remató que no le convence el “dialoguismo” como estilo de gestión. "Creo que si la gente nos empodera esta vez para hacer un cambio económico además de institucional, y después se los suma (a otros espacios y actores) después de la acción".

Su desagrado con el diálogo político, que es la esencia de la democracia, trasluce la opinión de Macri sobre el sistema político dispuesto por nuestra constitución, y revela –una vez más- una matriz autoritaria. Cuando se le planteó que la “teoría de Horacio es 40 + 90, tenés que acumular un 70 por ciento del sistema político para ir con eso a plantear las leyes y el cambio", Macri lo cortó de cuajo. "Eso puede durar meses, años, ese debate, y mientras tanto los jóvenes se van del país". 

Las declaraciones de Mauricio Macri confirmaron, una vez más, que el estilo de Larreta no es de su preferencia. En cambio a Patricia Bullrich, de perfil más duro, la ve "cada vez más sólida en la forma de plantear la idea de cambio que tiene y, además, ampliando su opinión en otros temas que no sean seguridad, con el que le ha ido muy bien en el gobierno".

Y a María Eugenia Vidal, quien parece ser su preferida por estos días, la nota "volviendo de esa salida traumática de la provincia. Recorriendo el país. Muy clara en el para qué hay que volver al poder. En entender cómo hay que negociar con el peronismo no republicano, que está con Pichetto. Entender que hay que ser mucho más firmes de lo que fuimos, ella con los intendentes del conurbano y yo con los gobernadores", sentenció. 

A diferencia de las tres opciones para la presidencia que rescata en el Pro, para la CABA Mauricio Macri no ve más que una. “En la Ciudad de Buenos Aires lo veo muy bien a Jorge (Macri), estoy cada vez más convencido. Puede ser quien le dé una continuidad con cambio a la gestión de la Ciudad”. Si bien “Lousteau va a presentar su propuesta por el radicalismo y yo, más allá de que trato de mantener la unidad de todos, soy del Pro”, destacó. 

Por el contrario, para la provincia de Buenos Aires Macri destacó a cinco postulantes de fuste dentro de la coalición. “Además de (Cristian) Ritondo y (Diego) Santilli está (Joaquín) De la Torre, (Javier) Iguacel y (Néstor) Grindetti.” Con cualquiera de ellos Macri cree que podría ganarse la elección.

Si bien consideró que el mejor mecanismo para establecer la candidatura son las PASO, hipotetizó frente a la posibilidad de que sean suspendidas. “Si no hay PASO tendremos que hacer una interna abierta nuestra, a costo de los partidos que integran la coalición, pero la vamos a hacer. Va a ser más trabajo, pero necesitamos tener un sistema competitivo, transparente y de nivel”, anticipó.

Finalmente, Macri evitó dar una respuesta sobre su decisión de intentar jugar o no su “Segundo Tiempo". “Reconozco que es importante quién, pero el para qué es mucho más importante. Eso no cambia en nada lo que estoy haciendo", destacó. Y completó  la respuesta afirmando que "a mí no me gusta que me digan lo que tengo que hacer”.

“Estoy caminando el país para transmitir que hay futuro. No nos resignemos. Estamos por terminar con el populismo en la Argentina”, profetizó, ante la mirada deleitada de Luis Majul, que una vez más, durante la entrevista, se mostró complaciente y disciplinado. Más bien pareció un apuntador de su entrevistado que un periodista político.  

En definitiva, no le ha ido mal jugando ese juego. Aunque en la práctica contradiga todo lo establecido por cualquier manual de periodismo. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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