Nacionales
Se bajó de la movilización en apoyo a CFK
El derrotero de Pablo Moyano en la interna de la CGT
Aislado y derrotado en la interna de la CGT, el dirigente camionero Pablo Moyano terminó por disciplinarse y comunicó a sus colegas de la conducción de la central obrera que no participará de la marcha del viernes para apoyar a Cristina Fernández, cuando le toque su turno de presentar su alegato en la causa Vialidad.
Pablo Moyano había generado revuelo interno al anticipar que la central obrera “acompañará de forma masiva” esa movilización. Sin embargo, las críticas que recibió tanto por la afirmación como por su decisión de darle estado público haciendo caso omiso de la opinión de los demás lo colocaron en una situación comprometida, por lo que optó por comunicarle a Héctor Daer su cambio de decisión. Incluso su propio padre, Hugo Moyano, había expresado su parecer negativo respecto de la participación en el evento.
Hasta ahora, Pablo Moyano sólo ha sumado fracasos en su intento de embarcar a la CGT en iniciativas en común con el cristinismo. Primero no tuvo éxito en la iniciativa que presentó junto a la Corriente Federal de Trabajadores, liderada por Sergio Palazzo y Vanesa Siley, de declarar un paro general en repudio al intento de magnicidio. Si bien la cuestión quedó pendiente de tratamiento, finalmente se archivó ante la opinión mayoritaria de “dejar actuar a la Justicia”.
En la interna cegetista, la parte del león la conserva el sector de “los gordos” (Héctor Daer, de Sanidad, y Armando Cavalieri, de Comercio), los independientes (Andrés Rodríguez, de UPCN; Gerardo Martínez, de la UOCRA, y José Luis Lingeri, de Obras Sanitarias) y el barrionuevismo (Carlos Acuña, de estaciones de servicio), a los que se suman algunos aliados como Jorge Sola (Seguros) y Sergio Romero (UDA).
Pablo Moyano, por su parte, comparte con Mario Manrique (SMATA), Omar Plaini (canillitas) y Cristian Jerónimo (vidrio) el Frente Sindical para el Modelo Nacional (FRESIMONA) y está aliado con el cristinismo, del mismo modo que la Corriente Federal de Trabajadores. En los últimos días quedó en claro que comparten posiciones públicas con la CTA cristinista que lidera Hugo Yasky, cuando justificó su encuentro con el embajador norteamericano Marc Stanley. Pero están en minoría en el consejo directivo de la CGT.
Daer y Pablo Moyano mantienen una larga y tensa situación de enemistad, que se reavivó cuando el sanitarista declaró que la CGT ya había decidido marchar a plaza de Mayo en la convocatoria del feriado del 5 de septiembre, y que una medida de fuerza como la que reclamaban sus adversarios en la central obrera sólo contribuiría a “empeorar el clima político”. Por su parte, el camionero replicaba que, en caso de omitirse el paro, con movilización de protesta ante la Corte Suprema incluído, “nos van a llevar puestos la derecha, la Justicia y los medios”.
En minoría, el moyanismo y la Corriente Federal debieron cancelar su iniciativa, pero la tensión interna se incrementó aún más. El que salió a responderle a Daer fue Manrique, quien lamentó la postura adoptada por sus contrincantes, e insistió en que, tras el atentado, la CGT tendría que haber abandonado el “equilibrio político” y “tomar posición” al respecto.
“Espero poder llegar al paro. Hoy, el movimiento obrero, lamentablemente, es un barquito de papel. Ya me cansé. Yo soy el secretario Gremial, estoy adentro de la bolsa. Cuando nosotros, con Pablo y los compañeros del frente sindical tratamos de unificar la CGT pensamos en darle otra impronta, en cambiar ciertas cosas. Darle una autonomía de pensamiento que nos permitiera responder a la gente”, estalló el sindicalista de SMATA.
El tenso silencio duró muy poco tiempo. Hacia fines de la semana pasada, Pablo Moyano anunció, de manera inconsulta, que la CGT apoyaría la movilización del próximo viernes 23 para apoyar a Cristina Fernández de Kirchner, afirmando: “La CGT está en estado de alerta y movilización. Se habla de un acto el 23 de septiembre, cuando la vicepresidenta declare (en el marco de la causa Vialidad) y vamos a acompañar de forma masiva también a esa movilización”.
Sus palabras cayeron como una bomba sobre el sector mayoritario de la CGT, que no estaba avisada al respecto, y salió a desautorizarlo inemdiatamente.
“Será un acto de su agrupación política. No involucra a la CGT. Lo que haga Pablo Moyano está dentro de su soberanía, pero no está en nuestra agenda”, coincidieron.
Fracasado el golpe de efecto que intentó, Pablo Moyano le avisó a Héctor Daer que había desistido de movilizarse. Pese a esto, las tensiones internas sólo consiguen incrementarse con el paso de los días y muchos son los que se preguntan hasta cuándo ambos grupos podrán continuar conviviendo dentro de la central sindical. (www.REALPOLITIK.com.ar)
ETIQUETAS DE ESTA NOTA
Hugo Moyano, Pablo Moyano, Héctor Daer, Armando Cavalieri, Sergio Palazzo, Vanesa Siley, CFK. CGT, SMATA¿Qué te parece esta nota?