La razón del fracaso de Batman y Robin: Un director “holgazán”

Aunque Batman es una tentación para todo realizador y es garantía de que cortará boletos en las salas de cine de todo el mundo, hubo dos proyectos que jamás fueron aceptados a nivel mundial. Hablamos de las dos películas que están, tal vez, entre las peores alguna vez vistas en el género de superhéroes. Se trata de dos producciones que fueron dirigidas por Joel Schumacher y que aunque fueron secuelas tuvieron a dos protagonistas diferentes.

Hablamos de Batman Forever, de 1995, y de Batman y Robin, de 1997. Mientras la primera tuvo a Val Kilmer como figura central la segunda lo tuvo a George Clooney. De las dos, fue la secuela la que se llevó la peor parte, al punto de que prácticamente todos los involucrados terminaron pidiéndoles disculpas a los fans por lo que habían hecho. La primera, por su parte, puede decir con orgullo que tuvo tres nominaciones al Oscar. 

Uno de los que fue nominado por esta película fue el director de fotografía, Stephen Goldblatt, quien estuvo también en la secuela. "Batman Forever funcionó, pero Batman y Robin fue horrible. Una película desastrosa con buena gente, que no funcionó. No es el fin del mundo. Creo que Batman Forever se ve bastante bien. Batman y Robin fracasó como película", aseguró en una entrevista en la que no se guardó absolutamente nada, y cuestionó a su director.

RP.- ¿Cómo fue para usted trabajar en las películas de Batman?

Las dos películas fueron dirigidas por Joel Schumacher, que puedo decir que probablemente fue el director más holgazán con el que alguna vez trabajé. Lo inventé todo yo. Solo se conformaba con que estuviera presentable. En serio, venía al set y decía "¿Qué hacemos hoy?". 

Aunque Joel no se involucraba en la planificación diaria ni en la semanal yo sí lo estaba y salió bien. Quiero decir, me nominaron para el Oscar por Batman Forever. Fue entonces cuando Joel se enojó. Bueno, tal vez porque no lo nominaron a él u otra razón. Lo llamé para agradecerle cuando me enteré que me había nominado y él me trató de muy mala manera así que le dije: "No me vas a arruinar el día" y le corté el teléfono. Cuando me llamaron para Batman y Robin dije: "De ninguna manera" y me fui a hacer otra película que fracasó. Y Batman y Robin seguía su camino. Habían contratado a otra persona pero parece que estaba muy perdida, es bastante intimidante tener sets así de grandes. Ya no se hacen así porque se hacen con efectos visuales. Habían despedido o iban a despedir al director de fotografía, me llamaron y me ofrecieron más dinero que el que jamás me pagaron para hacer una película o que el que me van a pagar, porque estaban en problemas, y estúpidamente dije que sí.

RP.- ¿Qué fue lo que le pidió Schumacher?

Tuvimos que hacer una presentación, particularmente en Batman Forever, para mostrar qué queríamos hacer. No tenemos idea de adónde vamos, pero inventamos una historia. Mientras la gente vea que no estás perdiendo el tiempo... Es un gran equipo, con muchos desafíos. Ellos quedaron convencidos y la produjimos.

Sabía que Joel Schumacher quería colores brillantes y que tenía un estilo muy cursi. A Val Kilmer no le gustó y más tarde tampoco le gustó a George Clooney. Pero yo lo disfruté porque tuve libertad total. Sugerí que usáramos la iluminación del rock. Los sets eran enormes. Tenés que entender que en esos años la iluminación convencional de una película era una tarea muy dura. La luz led no existía. Podrás imaginar, la Baticueva en Long Beach en el viejo hangar Spruce Goose era un set enorme y requería una gran cantidad de luces. Esto no le interesaba a Joel en lo más mínimo. Él quería algo que fuera divertido y colorido. Creo que no me dio una indicación de la iluminación en todo el tiempo que estuvimos ahí.

RP.- ¿Por qué diría que fracasó Batman y Robin?

Estuvo muy mal hecho el casting. Arnold Schwarzenegger no es un buen actor. Me parece que todos se durmieron en los laureles de Batman Forever. Pensé algunas buenas tomas para Batman y Robin. De hecho, las planificamos con una grúa en el set. Todas las tomas de riesgo se interpretaron invertidas por varias razones. Una era que al invertirla podríamos empezar en un ojo y terminar en la ciudad. Joel Schumacher y los editores (Mark Stevens y Dennis Virkler) lo desecharon todo. No prestaron nada de atención ni les importó. Así que me decepcionó, pensé que podíamos hacer algo maravilloso. Pero no estoy a cargo, solo soy el director de fotografía. Así que quedé atrapado en esto. Me pagaron muy bien. "Muchas gracias, lamento mucho que nadie prestara atención". (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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