22 de octubre de 2022 | Nacionales

De mal en peor

Un gobierno para el olvido

Las palabras de Facundo Moyano sonaron terminantes. Pero no se trataron de expresiones aisladas, ya que la mayoría de los integrantes del Frente de Todos podrían suscribirlas. Ni qué decir de los amplios sectores del peronismo que ya tomaron distancia, o que nunca formaron parte de la coalición.

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“Como peronista me avergüenza este gobierno”, sentenció. Y, por si fuera poco, remató afirmando: “Creo que es un gobierno que tiene que ser borrado de la historia del peronismo”.

La división en la celebración del 17 de octubre y la decisión presidencial de recuperar algo de la autoridad y el protagonismo perdido embarran aún más la cancha. El cambio de ánimo presidencial, que celebran en su mesa chica, es una pésima novedad para el resto. Alberto salió a criticar a Cristina y a la “Década Robada” casi en los mismos términos en que lo hacía entre 2011 y 2017. Pero una cosas era hacer tales declaraciones desde la oposición, y otra muy diferente como referente institucional de una coalición que ha perdido su rumbo hace rato. En pleno lanzamiento de la campaña electoral interna del Frente de Todos, su nuevo posicionamiento sólo podría llevar agua al molino de la oposición. Y lo peor es que, habida cuenta de sus drásticos cambios de humor, no se sabe cuánto le durará su rebeldía.

“Hizo un click. Y salió con todo a defender los números de la economía de su gestión y a hacer el cambio de gabinete solo. Es un cambio que se vio en los últimos veinte días”, admiten en su entorno, mientras esperan angustiados alguna nueva carta o expresión pulverizadora de la vicepresidenta.

Pero su intento de recuperación de su protagonismo perdido volvió a trastabillar, no frente a acusaciones o denuncias de ningún referente económico o político de alto vuelo, sino ante las declaraciones de un marginal que participa del reality Gran Hermano.

¿Hacía falta que la portavoz, Gabriela Cerruti, saliera a responderle, y que un importante funcionario la respaldara, afirmando: “No vamos a dejar que digan cualquier cosa de Alberto y del gobierno. Vamos a marcar lo que no creemos que está bien y lo vamos a hacer para que se enteren todos”?

¿Hacía falta que también Alberto Fernández saliera a justificar su honestidad?

Como hecho mediático, la reacción de un gobierno que ha dado pruebas sobradas de su espantoso manejo de la comunicación fue catastrófica.

Una verdad aceptada universalmente dentro del universo de la política, más allá de los tiempos y de la geografía, es que la entidad de un líder se mide por la estatura de sus enemigos.

La reacción del gobierno demuestra que la de Alberto Fernández no supera la de un sujeto sinuoso y oscuro que compite en un reality efectista.

Es justamente en este punto donde las declaraciones de Facundo Moyano cobran mayor vigor: “Creo que es un gobierno que tiene que ser borrado de la historia del peronismo”.

Con todo, las palabras del ex diputado resultan bastante moderadas. Para la mayoría de la población, este gobierno tendría que ser borrado de la historia argentina, sin divisiones partidarias. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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