“Quieren volver a la Edad de Bronce”: El Instituto de Hemoterapia bonaerense en su hora más oscura

Entre acusaciones de mal desempeño, malversación de fondos, horas extras truchas y persecuciones, el Instituto de Hemoterapia de la provincia de Buenos Aires, que fuera pionero en la donación de sangre en todo el país, vive las horas más oscuras de su dilatada historia.

Tras la trágica partida de Nora Etchenique, un ícono de la hemoterapia, la institución quedó a cargo de directores cuya gestión fue tan fugaz como polémica, como el caso de Francisco Leone, o dirigentes vinculados con la militancia kirchnerista, como Laura González, cuyo mayor logro a la fecha pareciera ser el de montar un extraño mural de Evita con frases de Cristina en su despacho.

“Esta institución, que fue un baluarte de la donación de sangre, hoy es poco más que una filial de los chicos de La Cámpora”, aseguraron profesionales del instituto a REALPOLITIK.

Semanas atrás, fueron los propios trabajadores del Instituto de Hemoterapia quienes exigieron la intervención de la gestión de la directora ultrakirchnerista Laura González, a quien señalaron como la responsable de una “gestión deficiente y sólo apuntada a la militancia en el seno de la agrupación La Cámpora”.

Las denuncias que caen sobre la cabeza de González y la directora del centro regional de La Plata, su amiga personal Nora Lescano, son múltiples. “A poco de llegar, Lescano desarticuló equipos que eran claves para el funcionamiento, persiguió a compañeros de trabajo, e incluso intentó obligar a renunciar a profesionales históricos”, aseguraron desde las oficinas de la capital bonaerense.

En las últimas horas, fueron los mismos profesionales los que renovaron su pedido de intervención del organismo, luego de la asunción como abogado del joven militante de La Cámpora, Lucas Vara. De acuerdo a las acusaciones vertidas desde el grupo de trabajadores del Instituto de Hemoterapia, “apenas asumió, sin tener ningún tipo de experiencia, comenzó a buscar cabezas para cortar e impidió torpemente la implementación de nuevas técnicas de serología”.

En efecto, Vara habría sido una pieza clave a la hora de establecer trabas a la incorporación de nuevas tecnologías que podrían permitir procesar unidades de sangre con los más altos estándares. “Quieren que la institución vuelva a la Edad de Bronce”, aseguraron. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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