De cara al 2023, Alberto Fernández les dará el 30 por ciento de la obra pública a las cooperativas

Los resultados de las encuestas que manejan los asesores del presidente Alberto Fernández empujan al gobierno a tomar medidas drásticas con el objetivo de retener el poder a partir de las jornadas electorales del 2023. El escenario, ciertamente, no es el mejor.

La interna en el seno del Frente de Todos continúa al rojo vivo. Mientras desde La Cámpora alimentan el eventual escenario de una Cristina Fernández de Kirchner candidata e impulsan la eliminación de las PASO, desde el entorno del presidente Alberto Fernández, cada día más reducido, no descartan una presentación del primer mandatario en octubre de 2023.

Con ese objetivo en mente, Alberto Fernández publicó el decreto 728/2022, sobre el funcionamiento del Consejo de la Economía Popular y el Salario Social Complementario (CEPSSC), que pareciera no tener otro fin que el de obtener el favor de las organizaciones sociales.

En efecto, en su artículo cuarto, el decreto firmado por el presidente traspasará a la órbita de las cooperativas de trabajo de la economía popular el 30 por ciento de la obra pública nacional, por iniciativas cuyos montos no superen los 300 millones de pesos. Además, se dará preferencia a aquellos oferentes que acrediten, en su nómina de empleados, al menos un 5 por ciento de trabajadores vinculados al programa “Puente al Empleo”.

“No hay ninguna posibilidad de que no haya PASO”, aseguró, tajante, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. “Y si no quieren ir a las PASO, entonces dejen a Alberto Fernández ir a su reelección”, exigió, distanciándose una vez más de la figura de Cristina Fernández de Kirchner.

Con numerosas obras de 300 millones en juego, las organizaciones sociales comienzan a evaluar la posibilidad de alinearse detrás del primer mandatario de cara a las elecciones 2023. La naturaleza del decreto, sin embargo, despertó discusiones puertas adentro del Frente de Todos.

“La mayoría de las agrupaciones existentes tienen, si bien no en los papeles, por lo menos en los hechos, un dueño específico, un dirigente político que termina adentro de las listas. En ese sentido, lo que el gobierno está haciendo es, de forma bastante directa, comprar aliados para las elecciones”, aseguraron allegados a Cristina Fernández en Casa Rosada.

El decreto esconde, además, otra medida que promete polémica tanto desde espacios de la oposición como del otro lado de la grieta oficial en el Frente de Todos. Se trata de un conjunto de obras públicas que, al menos en parte, estarán ejecutadas por personas sin ningún tipo de preparación, cooperativas sin conocimiento en construcción de obras de envergadura.

A poco menos de un año de las elecciones que definirán su futuro político, el presidente Alberto Fernández cristaliza el quiebre de su relación con Cristina Kirchner y apuesta a una alianza con las organizaciones sociales que lo catapulte a un nuevo mandato que, al menos por ahora, resulta muy lejano. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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