La foto que incomoda al kirchnerismo

Es el caso de la imagen que podría titularse “La foto que el cristinismo no quiere mostrar”. En ella puede observarse al por entonces presidente de la Nación, Néstor Kirchner, junto al jefe de Gabinete, Alberto Fernández -luego devenido en acérrimo crítico de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y finalmente ungido años más tarde como candidato presidencial- y a Horacio Rosatti.

El ex intendente de Santa Fe entre 1995 y 1999 y actual juez de la Corte Suprema de la Nación con pedido de juicio político por el mismo cristinismo, supo ser el primer procurador General del Tesoro entre el 25 de mayo de 2003, día en que asumió Néstor Kirchner como primer mandatario, y el 24 de julio de 2004.

Ese cargo lo ostenta, desde el 10 de diciembre de 2019, el todopoderoso hombre de Cristina, Carlos Zannini. Sin embargo, su paso por el gobierno K no termina allí.

Rosatti debió dejar la procuraduría para hacerse cargo, a pedido de Néstor Kirchner, del ministerio de Justicia, luego de que Gustavo Béliz renunciara, enfrentado con el jefe de inteligencia Antonio “Jaime” Stiuso.

Hoy Béliz, un hombre fuertemente vinculado al Opus Dei y al Papa Francisco, es una de las personas de máxima confianza del presidente Alberto Fernández junto a Vilma Ibarra, también funcionaria de Néstor Kirchner pero caída en desgracia con la llegada de Cristina al poder.

Solo una foto donde reina la tranquilidad, en el despacho presidencial, a espaldas del Sillón de Rivadavia, y una novela donde los buenos se convierten en malos para luego resucitar virtuosos.

¿Pasará lo mismo con Rosatti?. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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