“La película es una carta de amor a la fotografía”

En 2003, Ben Stiller dirigió una de las películas que se considera la más bella dentro de una filmografía repleta de comedias como Tropic Thunder o Zoolander. Se trata de La increíble vida de Walter Mitty, en donde también se puso en el rol del protagonista para contar una historia de viajes, fantasía y no renunciar a lo que uno quiere. Kristen Wiig y Patton Oswalt fueron algunas de las caras conocidas de esta producción.

En La increíble vida de Walter Mitty, el protagonista es un hombre de perfil bajo que trabaja en los archivos de la revista Life y que está muy enamorado de una de sus compañeras del lugar pero que no sabe cómo decírselo. La pérdida de un negativo hará que entable diálogo con esta mujer que lo empujará a hacer lo imposible. Incluido un viaje por el mundo en donde pondrá a prueba sus habilidades físicas.

Dirigida por Stiller, La increíble vida de Walter Mitty tuvo a Jeff Mann como su diseñador de producción, con quien también trabajó en proyectos como Tropic Thunder y, recientemente dio una mano en Severance (aunque no recibió créditos por esto). "Es una película que significa mucho para mí y para Ben Stiller", aseguró el realizador que contó cómo fue desarrollar este proyecto que a fin de año cumplirá una década.

RP.- ¿Cómo fue encarara este proyecto?

No fue fácil por momentos con el estudio, no fue una película económica para hacer. Era difícil describirla de forma breve para que cualquiera entendiera qué querías hacer. Era más elusivo que eso. Pero empezamos a darle rienda. Las locaciones fueron muy importantes, obviamente. El proceso de la película comenzó con este guion que era menos convencional que cualquier otra cosa que haya leído antes. Parecía más una novela, no un libreto. Era muy lírica en su desarrollo y el humor era tan específico. Y las visuales... Era más una melodía que un libreto. No quiero ser muy metafórico. No tenía una apariencia convencional.

RP.- ¿De qué forma trabajaron el mundo "mágico" en el que vive Walter Mitty?

Ben es fanático del arte, la fotografía, el cine y la arquitectura. La película es casi una carta de amor a la fotografía, por el contexto del a revista Life cerrando, el legado de los fotógrafos que dejaron su marca a través de la revista o fueron convocados por los editores de la revista adelantados a su época para documentar el mundo en la revista a través de su lente. Tuvimos acceso a su archivo, que te volaba la cabeza. Pero es una forma complicada de decir que la composición y la consideración de la composición del encuadre... Todo lo que hicimos tenía un elemento fotográfico en su composición. La composición fue clave y gran parte del diseño se guió a través de eso. Y muchas de las locaciones se inspiraron en la composición.

RP.- ¿Qué significa esta película para usted?

Estoy tan agradecido de que haya sido lo que fue porque el proceso de crear la película en base a ese libreto implicó desafíos únicos para hacerlo. Influyó... Para la gente que vio la película, que no es el mundo completo, pero la gente llega a ella, la descubre, ¿sabés? La gente ha tenido la gracia de compartir conmigo que la vieron y cuánto la disfrutaron. Hablaron de cómo resuena en ellos este viaje lírico y positivo, que no es como podrías describir otras películas. Significó mucho a nivel de corazón al hacer la película y realmente nunca supimos cómo iba a salir. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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