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22 de marzo de 2023 | Nacionales

Interna por los salarios

Kelly Olmos y el golpe de knock out sobre “Wado” de Pedro

Con la mediación del ministerio de Trabajo de la Nación, la CGT y las cámaras empresariales acordaron ayer un nuevo salario mínimo, que incluye aumentos en tres tramos no acumulativos de 26,6 por ciento y una revisión en el mes de julio próximo.

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De este modo, ese ingreso será de 80.342 pesos desde el 1° de abril, de 84.512 pesos a partir del 1° de mayo y de 87.987 pesos desde el 1° de junio.

Al tomar conocimiento de lo acordado, el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, salió a poner el grito en el cielo y  a reclamar la aplicación de una suma fija para que los asalariados pudieran fortalecer su poder adquisitivo.

"Estamos pidiendo que además de las paritarias funcione para algunos sectores de la economía donde los salarios están por debajo de la inflación, una suma fija", reclamó de Pedro.

Ni lerda ni perezosa, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, salió a responderle, lanzando un verdadero golpe de knock out. 
"Le digo a Wado De Pedro, el sector más retrasado es el de trabajadores municipales de la provincia de Buenos Aires. Deberían intervenir, porque no tengo injerencia en ese sector".

En castellano liso y llano, lo mandó a “cantarle a Axel” y a algunos jefes municipales aliados de Máximo Kirchner. Fiel a su tradición negociadora y pragmática, "Kelly" Olmos aseguró: "Esto tiene que resolverse por la vía de la negociación, porque cada sector tiene su particularidad y una decisión general interviene cambiando reglas del juego de cada sector, no es el mejor método".

El argumento de la ministra resulta coincidente con el de la mayoría de los sindicatos que forman parte de la CGT, y que se oponen a la fijación de sumas fijas por parte de los gobiernos, ya que devaluarían la importancia de las negociaciones paritarias, avanzarían sobre las conquistas sectoriales  y terminarían así por afectar la propia fortaleza del sindicalismo argentino. 

La ministra de Trabajo, a su vez, enfatizó que el nuevo salario mínimo, vital y móvil que se acordó este martes demuestra que  para "afirmar la institucionalidad" desde el punto de vista laboral, resulta indispensable "llegar a acuerdos mayoritarios".

Y destacó: “Me parece que es importante afirmar la institucionalidad desde el punto de vista laboral que significa llegar a acuerdos mayoritarios. En este caso, en este acuerdo que alcanzamos ayer partimos de una actualización para el mes de abril de 15,6 por ciento que demuestra un esfuerzo de recuperar lo que pudo haberse perdido por los índices inflacionarios".

A contrapelo de los conceptos críticos vertidos por De Pedro, "Kelly" Olmos puede exhibir como prueba del éxito de la negociación que llevó a cabo que la aprobación del nuevo monto del salario mínimo por la CGT y las cámaras empresarias se dio con 30 votos positivos, una abstención y uno negativo. 

En una Argentina en la que la negociación y los consensos resultarían fundamentales para desactivar la grieta y el confrontacionismo político irracional  que es su consecuencia, se trata de un ejemplo exitoso que sería desable que fuera extendiéndose hasta convertirse en la lógica de los procesos de toma de decisiones. Sobre todo en un contexto de continuada crisis como la que afecta a las sociedades humanas en nuestros tiempos. (www.REALPOLITIK.com.ar) 


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