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26 de marzo de 2023 | Provincia

Prioridades invertidas

“Tocamos fondo”: El ruinoso estado del Instituto de Hemoterapia provincial

Trabajadores del organismo que alguna vez fue pionero en la seguridad transfusional sacaron a la luz fotografías que muestran el preocupante abandono en el que se encuentra. “No sabemos si es desidia o corrupción”, explicaron. Apuntan al ministro Nicolás Kreplak.

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El ruinoso estado de las instalaciones del Instituto de Hemoterapia de la provincia de Buenos Aires fue, finalmente, sacado a la luz. Lo hicieron sus propios trabajadores a través de fotografías caseras, cansados de esperar una respuesta del ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak.

Las imágenes hablan por sí solas. El deterioro es notable y las condiciones laborales insalubres. Rajaduras, hundimientos en los pisos, filtraciones cloacales, desprendimiento de mampostería, baños en estado calamitoso, roedores y cucarachas por doquier, parecieran enmarcar el día a día de los profesionales de la salud y el resto del personal administrativo.

“Gran pesar. Tocamos fondo”, afirmó uno de los profesionales a REALPOLITIK, consultados por la situación imperante. Las acusaciones se dirigen hacia el ministro Nicolás Kreplak y al gobernador Axel Kicillof por igual. Al primero, lo acusan de inoperancia. Al segundo, de “barrer” prestigiosos profesionales para designar a desconocidos sin mayores antecedentes que una militancia en La Cámpora.

El instituto, hasta hace no mucho dirigido por la prestigiosa Nora Etchenique, hoy está en manos de dirigentes de escasa preparación en la materia, como Laura González, reconocida profesionalmente por haber pintado un mural de Evita en su despacho, o Nora Lescano, acusada de haber desarticulado equipos claves para el funcionamiento del organismo y obligado a renunciar a profesionales históricos.

“Llevaron el Instituto de Hemoterapia a la Edad de Bronce”, explicaron los trabajadores, recordando el rol del abogado del organismo, Lucas Vara, un inexperto militante de La Cámpora puesto a dedo por Nicolás Kreplak. “Apenas asumió, sin tener ningún tipo de experiencia, comenzó a buscar cabezas para cortar e impidió torpemente la implementación de nuevas técnicas de serología”, aseguraron.

Hoy por hoy, explican los trabajadores, la gestión de Lescano está llevando al Instituto de Hemoterapia a la ruina. Mientras tanto, en el pasado mes de octubre se inauguró el segundo Centro Regional de Hemoterapia en La Plata. Millones de pesos invertidos, miles de metros cuadrados de edificios nuevos y muchas cintas para que los políticos puedan cortar para la prensa. De acuerdo a sus propios empleados, prácticamente no tienen donantes de sangre. Nadie va. Prefieren continuar dirigiéndose a la sede de calle 66.

La falta de coordinación, políticas eficientes y profesionales preparados al frente de los organismos pareciera estar arrastrando a la salud pública bonaerense a una era de oscuridad y atraso sin precedentes. Para muchos de sus trabajadores históricos, incluso, ya no hay vuelta atrás. Es demasiado tarde. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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