Con el apoyo de intendentes, Gerardo Morales despliega su estrategia en territorio bonaerense

En algún ámbito partidario de la primera sección electoral como es San Martín, Gerardo Morales pudo intercambiar inquietudes con los jefes comunales de San Cayetano, Miguel Gargaglione; de Maipú, Matias Rappalini; de General Viamonte, Franco Fleixas; de Lincoln, Salvador Serenal; y Edgardo Bataglia, de General Arenales.

Algunos persisten desde aquél desafío de las internas partidarias realizadas en el 2021 para apoyar una alternativa contra el actual presidente del comité provincia, Maximiliano Abad, y otros se constituyen en una novedad.

En esta última categoría aparecen los jefes comunales de Lincoln y General Arenales, distritos de la cuarta sección electoral donde hay referentes importantes del oficialismo partidario y de aliados tales como Daniel Salvador.

Existe, sí, una notable ausencia en esa foto y es la del intendente de Puán, Facundo Castelli, pero fue circunstancial porque estuvo el 15 de marzo en las primeras filas del Gran Rex, asistiendo al primer discurso de Morales con su traje de precandidato.

Y, por supuesto, a ese equipo de referentes municipales con territorio, hay que incorporar a Gustavo Posse quien, de hecho, ya camina las calles como virtual precandidato a gobernador de Morales, aunque para concretarlo hay que definir dentro del partido un esquema de internas para dirimir candidaturas para esa categoría.

Lo cierto es que todos los jefes comunales que participan de este entramado no son possistas del nivel denominado “químicamente puros”, porque algunos tienen vuelo propio o se referencian con otros dirigentes.

Por caso, Miguel Gargaglione, viene de ser durante varios años el presidente de la Liga de Intendentes Radicales, en coincidencia con la última parte del mandato de María Eugenia Vidal y el primer bienio de Axel Kicillof. Tuvo, como tienen en este sitial, autonomía y peso propio de diálogo y negociación que lo tiene al nivel de un presidente de bloque legislativo. Su política es la de establecer alianzas, pero no se subordina tan fácil.

En la línea de incondicional de Gustavo Posse está el jefe comunal de Maipú, Matías Rappalini quien desde el 2020 y tras una serie de diálogos decidió siempre jugar al lado del hombre fuerte de la primera sección electoral. Lo acompañó en momentos de baja o alta intensidad partidaria y eso lo convierte en un importante referente del possismo puro en el interior.

Los demás jefes comunales nombrados se referencian con el espacio de Protagonismo Radical que integran además Federico Storani, Juan Manuel Casella y, por momentos, el economista y senador nacional, Martín Lousteau. Los comentarios que circulan es que, llegado el caso de una definición se alinearían con éste último, que es el referente de la corriente Evolución.

En tren de sumar jefes comunales, está muy fuerte la versión del acercamiento del intendente de Rojas, Román Bouvier, de quien se comenta que viene amagando a mostrar su apoyo incondicional no sólo a protagonismo, sino a Morales.  Allí ocurre que el referente poderoso es el ex jefe comunal y actual diputado provincial Claudio Rossi, quien estaba encolumnado en el storanismo y desde hace un tiempo milita junto a Daniel Salvador y Maximiliano Abad.

En esas gestiones operativas partidarias para traer al citado intendente se encuentra el también ex jefe comunal y ex presidente de la Cámara de Diputados provincial, Marcelo Gear.

Por lo pronto, Gerardo Morales ya cuenta con una pata estratégica dedicada al estudio intensivo de las necesidades del territorio y de paso, suma respaldos importantes para dar sustento a su mensaje en su ansiada proyección para desembarcar en el Casa Rosada en diciembre del 2023. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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