Desesperada por su pésima campaña, Patricia Bullrich arremetió la constitución y el Código Penal

En el programa del comunicador ahora libertario, Alejandro Fantino, la candidata de JxC anticipó que en un eventual gobierno modificará el Código Penal para habilitar las escuchas que tengan los detenidos por narcotráfico con sus abogados. "Cuando un preso que le puede estar mandando un mensaje a alguien, vos grabás la conversación con su defensa, vamos a ponerlo en el Código Penal", justificó.

Ante los cuestionamientos de Fantino sobre la constitucionalidad de la iniciativa, Bullrich respondió. "La defensa es una defensa constitucional y la defensa se graba". Y al comprobar la inconsistencia de sus dichos, explicó: "Yo puedo grabarlo, lo puedo tener como un elemento de prueba, puedo no escucharlo, tenerlo con un sistema de protección a esa comunicación y el día de mañana el juez ordena (escucharlo)".

No se quedó allí. También la ex guerrillera adelantó que bajará la edad de imputabilidad a los catorce años y que si alguien con menos de esa edad comete un delito no iría a la cárcel común, pero sí recibiría un tratamiento para que no vuelva "a su casa como si nada". 

Las declaraciones de Bullrich, que amenazan con poner fin al estado de derecho en la Argentina, fueron contestadas desde todo el arco político. Pero lo más interesante fue, sin lugar a dudas, que su candidato a vicepresidente, y la de Javier Milei, mantuvieron un duro cruzo a través de las redes sociales.

Victoria Villarruel le contestó con un tajante: "Hacete asesorar. Patricia, esto es ilegal. No se puede hacer", publicó en su cuenta de X.

Y en otro posteo, la mujer que visitaba a Videla y de otros genocidas explicó que "las garantías constitucionales del debido proceso no se pueden reformar", ya que son parte de la constitución y aprovechó para subrayar la necesidad de "reinstalar la inteligencia criminal".

También Villarruel agregó que, en caso de imponerse en las elecciones, impulsará la limitación de la comunicación para que "no pueda haber celulares en las cárceles". "Debe haber teléfono público, pero de ninguna forma se puede hacer lo que proponés porque es ilegal", enfatizó. “De ninguna manera vamos a ir contra la constitución o afectar los DDHH. Lamento Patricia pero esto es cualquiera", concluyó.

Luis Petri salió a cruzar a Villarruel en un punto débil de su argumentación: "Hacete asesorar, ya están prohibidos los celulares y es obligatorio colocar inhibidores de señal en las cárceles. Es una ley de mi autoría que se aprobó en el 2017". Y adicionó: "Decían que no se podía exigir el cumplimiento íntegro de las penas y lo hicimos. Vamos a terminar con los delitos planificados dentro de las cárceles y todo delincuente que organice delitos en las cárceles va a ser escuchado judicialmente. ¡Con nosotros el delito se termina en serio!".

Con su intervención Bullrich, una vez más, demostró su ignorancia supina respecto de las normas y su escasa disposición a obedecerlas. Llamativamente consiguió quedar a la derecha de Villarruel, cuando todos pensábamos que allí estaba la pared.

Como pato de campo, Patricia continúa su campaña. De desacierto en desacierto. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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