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Guerra de almohadas en LLA
Lila Lemoine cruzó a Iñaki Gutiérrez con una indirecta contra Milei
Lila Lemoine nació en 1980 en una familia de clase media de José León Suárez, que durante toda su vida se desempeñó en tareas de atención al cliente en compañías como Fibertel, Hewlett-Packard e IBM, hasta que a los 29 años comenzó transitar el cosplay, para profesionalizarse cuatro años después.
A partir de su incursión en el cosplay, Lilia Lemoine condujo eventos y participó en actividades vinculadas con los comics y el anime, con sus coloridos trajes y caracterizaciones, que combinó con su actividad como maquilladora.
Su acercamiento a la política se produjo en 2019 a través de José Luis Espert, con una candidatura fallida a diputada nacional por la CABA. Por entonces se vinculó con Javier Milei a través de su hermana Karina, colaborando en el show El consultorio de Milei. Los biógrafos afirman que la relación fue mucho más estrecha, ya que no sólo habría sido pareja del actual presidente sino que también era una de las pocas personas que ingresaban a su domicilio, cumpliendo una especie de rol de acompañante terapéutica y administrando su medicación.
Como la mayoría de los miembros del estrecho círculo original de Milei, Lemoine quedó condenada a cumplir un papel marginal, luego del entendimiento con Mauricio Macri tras la elección general, de cara al balotaje. La llamativa señorita que demostraba escasa coherencia en sus discursos, y no dudaba en proponer la eliminación de los jubilados para achicar el gasto social, o en atacar a la legisladora Ofelia Fernández por no tener una silueta hegemónica, y que no cesaba de sostener un discurso anti-feminista ya había sido electa diputada nacional, pero resultaba “políticamente incorrecta” para el electorado de Juntos por el Cambio que debía darle los votos cruciales para acceder a la presidencia.
Lemoine quedó herida por el despecho y se mostró muy poco satisfecha con la relación que Milei estableció con Fátima Flórez, sin importar si era un acting o un vínculo real. Si bien no dejó de defender al actual presidente ni de colmarlo de elogios, insistió con sus ácidos comentarios, tanto explícitos como tácitos, respecto del nuevo círculo áulico del que se rodeó. En este sentido, una publicación en su cuenta de X del día de ayer, si bien no especifica nombres, significó un claro ataque a Iñaki Gutiérrez, uno de los cerebros de la comunicación por aplicaciones de Javier Milei, quien resultó clave en la captura del voto joven y fue recompensado con una designación en la órbita del nuevo gobierno, al igual que su novia, Eugenia Rolón, quien estableció el vínculo entre ambos.
En una publicación del 13 de diciembre pasado, Iñaki afirmó: “Me metí en política para cambiar la realidad de mi patria que hoy hace que uno de cada dos argentinos sea pobre, no por un sueldo. Es por eso que hoy anuncio que trabajaré en el gobierno de Javier Milei ad honorem. Al no estar la posibilidad de renunciar al sueldo lo donaré”.
Después de mucho pensarlo, Lemoine le respondió ayer: “Me pondré quisquillosa con un término antes de (intentar) dormir: Nada es gratis... El término correcto es ad honorem, donde no se busca un beneficio monetario... pero cualquiera que diga trabajar ad honorem tiene que poder justificar de qué vive!!!”
Y a continuación explicó: “Yo trabajé para la legislatura dos años yendo a pérdida invirtiendo cada peso en apoyar a Milei, acompañándolo ad honorem como maquilladora, estilista, fotógrafa personal y de campaña (por dar un ejemplo, muchas de las fotos de las boletas las tomé yo). Muchas veces haciendo recortes, transmisiones, transcripciones y gráficos. Incluso generé contacto con artistas y los acerqué al igual que hicieron otros miembros de mi equipo”.
Una vez realizado este descargo personal, lanzó su oficina sobre el community manager: “De todo esto yo recibí el honor de acompañar y ayudar a nuestro presidente (y amigo) durante mucho tiempo y por supuesto, el orgullo de que otros me vieran parada a su lado. Y eso vale más que un cachet de maquilladora o fotógrafa si lo que uno persigue no es monetario. El que te dice que hace algo gratis y se denomina liberal te miente porque todo liberal (ni hablar el libertario) sabe que nada es gratis. O simplemente es torpe y no recae en sus palabras… o busca un beneficio ulterior o cobra por otro lado y le falla el inconsciente. Recuerden, ad honorem no es lo mismo que gratis!”.
El argumento utilizado por Lemoine para atacar a Iñaki perfectamente podría aplicarse al propio Milei, quien ha sorteado su asignación como diputado nacional, sin haber tributado por ninguna de las conferencias que presuntamente habría dictado y que serían su principal fuente de ingresos. Asimismo incurre en otra falacia: si bien no fue designada ella misma en un cargo público como pago, fue incluida en un lugar expectante en las listas de La Libertad Avanza, accediendo a un salario de alrededor de 2,5 millones pesos.
Tal como es su característica, sus razonamientos son intrincados, contradictorios y fácilmente rebatibles, lo cual es un sello en el orillo de ese espacio político. Así, quien se define como una “ de esas personas que ve una lombriz deshidratada y la pone en el agua, o una zuculenta o malvón perdido al costado de un cantero, lo levanta y lo lleva en su mochila a casa y lo pone en una maceta a ver si se salva”, no tiene inconveniente alguno en recomendar la eliminación de jubilados o la represión a quienes reciben planes sociales por un monto miserable.
¿Seguirá sangrando por la herida, se disciplinará o terminará siendo descartada por un Javier Milei que no tuvo inconvenientes en reivindicar a Luis Caputo, Patricia Bullrich o Mauricio Macri, echando al cesto de los desperdicios a sus compañeros de sus duros tiempos de instalación política? (www.REALPOLITIK.com.ar)
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Luis Caputo, Patricia Bullrich, José Luis Espert, Ofelia Fernández, Mauricio Macri, Iñaki Gutiérrez, Eugenia Rolón, Lilia Lemoine, Fátima Flórez¿Qué te parece esta nota?
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