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La grieta en la ley Ómnibus: Una encuesta destaca las posturas repartidas entre los argentinos
Los consultores políticos Daniel Ivoskus y Shila Vilker analizaron las principales percepciones de la ciudadanía sobre la flamante era Milei. “Contexto polarizado, opinión pública como principal sostén del gobierno y rol opositor vacante, los principales puntos para analizar en el comienzo de un nuevo gobierno en Argentina”, subrayaron.
por:
Adrián González
Mediante un hilo de X, el consultor político Daniel Ivoskus y la analista de opinión pública Shila Vilker evaluaron lo que dejó enero para el gobierno nacional. En primer lugar, se refirieron a la “dinámica polarizada” de la clase política argentina: “Los tercios que protagonizaron las últimas elecciones se vieron compactados por la coyuntura. Volvimos a los dos polos: de un lado está sólido el FdT mientras que del otro el oficialismo junto a sus aliados provisorios”, señalaron. Así lo refleja el último sondeo de la consultora Trespuntozero (1.040 casos), dado que las opiniones positivas acerca del futuro del país para los votantes de Patricia Bullrich son similares a los electores de Javier Milei, una proyección opuesta para aquellos que se inclinaron por Sergio Massa en los últimos comicios presidenciales.
No obstante, hicieron hincapié en que el 56 por ciento que apoyó a la flamante gestión libertaria en el balotaje “empieza a menguar” y profundizaron: “Llama la atención, producto del poco tiempo que pasó de Milei en el poder, que haya una leve fuga de quienes lo apoyaron en la segunda vuelta. La evaluación del gobierno nacional o rumbo percibido del país se puede ver un pequeño porcentaje que enciende una luz de alerta”. Este análisis se desprende del 31,3 por ciento de los electores de Bullrich que tiene “sentimientos negativos” por la situación del país, sumado al 15,2 de los votantes de Milei. “La tristeza, el miedo y el enojo siguen siendo síntomas de la sociedad argentina. La inflación lidera las problemáticas y los argentinos son escépticos ante su solución, ya que más de la mitad no confía en que se solucionará”, analizaron.
Más allá del contexto y la merma de expectativas en el electorado oficialista, Ivoskus habló de “luz verde” para el presidente porque continúa con un diferencial de imagen positivo (+2,9) al igual que la vicepresidenta Victoria Villarruel (+3,4); sin embargo, como contracara, aclaró que “la tendencia de imagen positiva de Milei está a la baja”. Por otra parte, destacaron la vacancia de los líderes antagonistas al nuevo gobierno: “Si bien la coyuntura va dando lugar a la reconfiguración del mapa político, todavía no hay un opositor claro. Pero si hay espacio para uno: 7 de cada 10 votantes del FdT se sienten representados por algún político. Los símbolos y significados que caracterizan a la oposición siguen generando un sentido de pertenencia en sus adherentes”.
Otro factor clave que resaltaron fue la “paciencia ciudadana” ante los tiempos razonables para resolver los problemas del país: “Es uno de los datos categóricos a favor de Milei y demuestra su fortaleza ante la opinión pública. Dos años es la temporalidad más elegida por los encuestados, sobre todo entre sus votantes y los de Patricia Bullrich”. En cuanto a las percepciones sobre el presidente, catalogaron que mantiene su “narrativa intacta” reflejado en el 70 por ciento está “muy” o “bastante de acuerdo” en que no es un político tradicional: “Milei sigue siendo percibido como un outsider: no solo en sus votantes, sino en gran parte de los opositores. Si bien la opinión pública es un recurso volátil, el presidente tiene margen para seguir fomentando su relato político de ir contra la casta”.
Asimismo, ponderaron la “efectividad comunicativa” del gobierno porque el 96 por ciento de los encuestados declaró que vio la foto oficial del Gabinete. “Es interesante pensar en la potencia de su difusión y repercusión ya que no fue necesariamente foco de contenidos humorísticos como memes. Se trata de una de las imágenes más simbólicas de la gestión Milei y el conocimiento es total. El mensaje llegó”, aclararon. Igualmente, las repercusiones de la foto fueron distintas según los segmentos electorales: “Despierta 'esperanza' entre los oficialistas y votantes de Bullrich y 'asco' en la oposición”.
Por otro lado, denominaron a la ley Ómnibus como “símbolo de la grieta” entre los que se reparten el 47 por ciento que considera el paquete de reformas como “mal” o “muy mal” y el 45,4 “bien” o “muy bien”. “El conocimiento sobre el proyecto es total en la opinión pública, 8 de cada 10, y la valoración está dividida. Por el lado de quienes están de acuerdo, hay posiciones intermedias (aprobaciones con cambios)”, indicó Ivoskus. Finalmente, en torno a la actitud del Congreso frente el proyecto, el 40,5 por ciento manifestó que deben “votar en contra”, el 27,8 “votar en su totalidad la ley” y el 27,6 “votar algunos aspectos y reformar otros”. “La Ley Ómnibus presenta un dilema interesante, ya que el gobierno de Milei, para componer una mayoría, necesita contar con esas posturas blandas que rechazan el 'a todo o nada'. Un desafío que se le presentará durante todo su mandato”, concluyeron. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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