
Tecnología
Daniela Moris, ex esposa de Rodolfo Burgos, denunció en 2021 que su hija menor de edad había sido abusada por su propio padre. Desde entonces su vida ha corrido peligro en reiteradas oportunidades, al tiempo que denunció un amedrentamiento permanente.
Con temor, injuriada y calumniada, por haber denunciado un aberrante hecho, Daniela Moris espera el día del juicio contra su ex esposo Rodolfo Burgos, docente de derecho constitucional de la Universidad Nacional de Tucumán y uno de los propietarios de Canal 10 de esa provincia. En 2021, Burgos fue denunciado por abusar sexualmente de su pequeña hija de apenas tres años.
Desde entonces, su madre se convirtió en querellante de la causa para tener acceso a la misma, dado los influyentes vínculos del empresario, quien a su vez posee fuertes contactos con la política y la Justicia provincial. Esto se debe a que, además de su rol como empresario mediático, es apoderado del Movimiento Popular Tres Banderas, por el que Alejandro Sangenis es legislador provincial.
En las últimas horas, su hija, Cecilia Sangenis, quien mantendría un estrecho vínculo con Burgos, se presentó en el edificio en el que Daniela Moris vive junto a su hija prohibiéndole la entrada. Según denunció, luego de intentarlo varias veces, Moris pudo acceder y, a su paso, Sangenis le gritó: “Te vas a arrepentir hija de mil puta, te van a mandar matar”. En la denuncia radicada este 14 de febrero, Moris incluyó un escalofriante detalle que data de tiempo atrás.
Según contó a la policía provincial, Cecilia Sangenis tendría en su poder videos íntimos que la involucran, tomados con una cámara a través de la cerradura de departamento. Los mismo datarían de cuatro a seis meses atrás y habrían sido utilizados para amedrentar a la madre de la pequeña víctima de un presunto abuso.
Sin embargo, no es la primera vez que sufre graves represalias. “Cuando fui llamada a ampliar la declaración penal por el juicio de abuso, un día antes (Burgos) intentó atropellarme, el fiscal Fernando Blanno no hizo nada; solo dictó una restricción de 300 metros. En ese momento Burgos estaba representado por María Soledad Deza, abogada feminista presidenta de la Fundación Mujeres por Mujeres”, sostiene la mujer.
Según denuncia Moris, el hostigamiento y las amenazas se convirtieron en una constante desde que decidió denunciar a su ex esposo. Desde entonces, Burgos y un poderoso sector de la alta sociedad con el que se vincula se habrían encargado de vigilarla y controlar cada uno de sus movimientos.
Finalmente, vale destacar que la apelación presentada por la defensa de Burgos fue rechazada en junio de 2023 y se espera que la causa, que ya ha sido elevada a juicio, avance en los próximos meses. (www.REALPOLITIK.com.ar)
ETIQUETAS DE ESTA NOTA
¿Qué te parece esta nota?
MÁS NOTICIAS