Facundo Manes concentra masa crítica y teje un proyecto propio

Quienes ven la “media copa llena” se regocijan con un punteo virtuoso de apoyos que el legislador obtuvo en su “metier” por conquistar la máxima representación de esa bancada en la cámara baja. Esto es porque, en el mientras tanto, fue acrecentando empatía con importantes referentes y hasta dejó algunas huellas políticas interesantes que configuran un importante punto de partida.

LÍNEA DE DIÁLOGO

Manes perdió frente a la compulsa con Rodrigo De Loredo, pero quedó en buena línea de diálogo con varios de sus pares entre quienes están los incondicionales como el bonaerense Pablo Juliano y otros que, comulgando en los mismos estilos, tienen que seguir dialogando para armar un consorcio con finalidades comunes.

En este último lote están, por ejemplo, los legisladores de la provincia de Jujuy que responden a Gerardo Morales y al actual mandatario norteño, Carlos Sadir, o los radicales “sin tierra” como el entrerriano Pedro Galimberti y el formoseño Fernando Carvajal.

Los jujeños obviamente cotizan sanamente su condición de manejar una gran cuota de poder y en los dos casos restantes, se trata de dirigentes que han ganado importante visibilidad con sus intervenciones categóricas en el plenario de comisiones de Diputados cuando se discutió sobre la ley Ómnibus.

El mentado consorcio supone un esquema asociado en el cual Manes pretenderá legitimar un título de “primum interpares” con el manejo político que le permitan los citados dirigentes legislativos y territoriales.

ALEJADO DE ABAD

Es una lista aún más extensa que tiene su andarivel partidario, hay una lupa puesta en la plataforma que se sustente en territorio bonaerense, donde hay un oficialismo que, a pesar de su individualismo y en buena medida, apoya al actual titular del comité provincial, el senador nacional Maximiliano Abad.

Abad está fuertemente sospechado de haber engañado a Manes con un incondicional apoyo al proyecto presidencial que asomaba para el profesional galeno allá en 2023. Pero esto funcionó para los intereses personales de Abad, quien potenció ese proyecto lo suficiente como para mostrar el poder territorial del radicalismo provincial hacia la actual ministra de Seguridad.

Al restar el apoyo a Manes e inclinar su apoyo a Patricia Bullrich, pudo hacer los acuerdos que convenían a sus intereses personales y de sus asociados y que explican el presente de algunos escaños claves en el Congreso y en la Legislatura.

LA LUPA SOBRE PROVINCIA

Esto ya es historia, pero la experiencia de la frustrada empresa presidencial le sirvió y mucho a Manes para tomar debida nota y corregir errores que han sido fruto de la excesiva ingenuidad.

Ahora, y con el diario del lunes bajo el brazo, Manes volvió a la carga con su competencia iniciada allá por diciembre y que, pese a una nueva frustración, le dejó algunos saldos positivos, como es el de las simpatías recogidas y el mojón que plantó en la legislatura bonaerense.

Sirve y mucho para su cosecha una referencia al bloque armado entre los Diputados provinciales, donde seis legisladores decidieron alejarse del bloque. Es liderado por el platense Claudio Frangul y tiene en sus filas a una seguidora de la primera hora de Manes como es Nazarena Mesías, oriunda de la tercera sección electoral, correspondiente al sur del conurbano.

Esta bancada provincial ya dio señales fuertes como haber exigido respuestas ante la insuficiente cobertura de la obra social estatal IOMA, como así también su fuerte rechazo al paquete fiscal que presentó el gobernador Axel Kicillof. 

Esta oposición de carácter indubitable hacia el kirchnerismo se asocia a la postura de férrea resistencia que Manes pregonó contra las políticas económicas de Javier Milei al cuestionar la ley Ómnibus. De esta manera se va incubando una “tercera posición” o postura equidistante tanto del kirchnerismo puro, como así también de los libertarios.

LAS INCÓGNITAS

Hay sospechas acerca de cómo seguiría creciendo el apoyo a Manes en territorio bonaerense. Algunos intendentes se han sacado una foto, pero eso lejos está de suponer una piedra fundamental de algo muy ambicioso. Entre quienes detentan cierta reserva histórica y doctrinaria, recibió apoyos del ex diputado nacional Federico Storani, quien en forma muy evidente y estridente le brindó su adhesión en apariciones mediáticas y partidarias.

En el terreno de las indefiniciones se encuentran aún distintas corrientes como el denominado “casellismo” que responde al ex diputado Juan Manuel Casella o las huestes que responden al ex intendente Gustavo Posse, quien aún conserva importantes cuotas de poder en la Legislatura y en distintos concejos deliberantes de la primera sección electoral (norte del conurbano).

La disputa táctica clave la tendrá Manes con los antiguos amigos del “salvadorismo” que allá por el 2021 le dieron una importante satisfacción en las primarias contra Diego Santilli.  Si bien el médico fue derrotado por el “Colo”, Manes pudo adjudicarse un simbólico triunfo “territorial” ganando en cerca de un centenar de intendencias.

Los seguidores del ex vicegobernador Daniel Salvador son dialoguistas, pero tampoco tienen un sí fácil, teniendo en cuenta que son quienes construyeron su poder propio en los territorios. Además, tienen un presente de fuerte acercamiento con Maximiliano Abad que, por el momento, aparece indisoluble si no aparece una fuerte oferta que haga mirar con simpatía a una alternativa nacional partidaria.

Será largo el recorrido que deba hacer el legislador oriundo de Salto quien, para empezar, tiene a un importante lugarteniente como es su hermano Gastón que, como titular de la convención nacional, tiene línea directa formal y legítima de diálogo con distintos líderes territoriales.

Por lo pronto, las cartas están echadas sobre la mesa de un juego apasionante y todo indica que el camino adquirió un recorrido de mayor vigor y que se ofrecerá como opción a los hombres y mujeres de Alem. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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