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11 de marzo de 2024 | Nacionales

Aumento de sueldos

El trasfondo de la caída del secretario de Trabajo, Omar Yasín

Dentro de la guerra facciosa desatada dentro del gobierno nacional, la disputa entre la ministra Patricia Bullrich y Mauricio Macri se refleja en casi todos los conflictos.

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El mediático despido de Omar Yasín de la secretaría de Trabajo no fue la excepción, a quien se responsabilizó por el aumento del 48 por ciento en el salario de Javier Milei, la vicepresidenta, los ministros y los secretarios de estado.

Una vez más, se trata de otra falacia a las que nos tiene acostumbrados la actual gestión, ya que Yasín no tuvo nada que ver con la asignación de ese incremento salarial, que fue concedido a través de un decreto firmado por el propio Milei, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. Pero, por la dimensión pública que tomó el tema, incluido un extenso cruce de posteos entre Milei y Cristina Fernández de Kirchner que le resultó muy negativo al mandatario, era necesario hacer rodar alguna cabeza. Y esa fue la de Yasín, a quien desde hace un tiempo se quería desplazar.

Despreciando una vez más todas las prácticas habituales en la materia, Milei anunció este lunes en una entrevista con el canal oficialista La Nación+ el despido del secretario de Trabajo, Omar Yasín, a quien responsabilizó del aumento de sueldo de él mismo y sus funcionarios. Pero la razón de su eyección no fue esa, sino haber quedado involucrado en la disputa entre Mauricio Macri y Patricia Bullrich, con Jorge Triaca como principal operador macrista.

“Lo he despedido. Fue un error que no debió haber sucedido. Lo están notificando en este momento”, anunció Milei por el multimedia, aunque varios referentes políticos se expresaron en sentido coincidente con el de Cristina, asignándole toda la responsabilidad al primer mandatario que firmó de puño y letra el incremento de sus propios haberes.

“Si no sabe lo que firmó, estamos en problemas”, sentenció Miguel Pichetto, “El presidente tiene que conocer lo que firma. El secretario de Legal y Técnica le tiene que informar lo que firmó. No es un decreto de Cristina. Es un decreto que firmó él en febrero y está publicado en el boletín oficial”, argumentó.

La secretaría Legal y Técnica es la encargada de cuidar la firma del presidente cuando hace los decretos. La paritaria de los empleados públicos la negocia del subsecretario de Transformación del Estado, Armando Guibert, que depende de Posse. Yasín no tenía esas funciones. Sospechosamente, el secretario Legal y Técnico es un hombre de Mauricio Macri, el Dante Javier Herrera Bravo.

Yasín no tuvo nada que ver con el aumento autoasignado, pero venía sufriendo cuestionamientos respecto del rol de su gabinete y sus funcionarios, del uso de autos oficiales de la estructura estatal y el manejo de los trámites ministeriales, a punto tal que recibió una reconvención pública de Pettovello, la titular del ministerio.

Pero la mano que planificó la caída de Yasín, bullrichista, no habría sido otro que Jorge Triaca, quien no para de operar en el área de Trabajo y ya consiguió el ingreso de una oleada de funcionarios propios. Para su objetivo de quedarse con el control total de la secretaría había que destituir a Yasín, y el aumento de salarios firmado por Milei fue la excusa perfecta.

Si bien Yasín no tenía una relación fluida con el sindicalismo, ya que había dejado las decisiones en manos del ministro de Economía, Luis Caputo, el empoderamiento de Triaca generó inmediatamente preocupación, ya que el gobierno ha puesto su mira en el mundo gremial y en los derechos de los trabajadores, y todos recuerdan la andanada de intervenciones gremiales que motorizó, los niveles de corrupción que se comprobaron en esas mismas estructuras cuando logró tomar el control y la escalada contra aquellos que se oponían durante su manejo de la cartera de Trabajo, durante la gestión de Mauricio Macri. Tampoco resulta fácil de olvidar que sus funcionarios promovían el terror vaticinando acciones judiciales contra sindicalistas que luego se corroboraban en caso de no cambiar la actitud.

Resta saber cuál será la reacción de Patricia Bullrich ante la decisión de Milei, y cómo afecta las internas del Pro y de LLA. También si los reptilianos seguidores del presidente se comerán una vez más el caramelito de madera de su discurso anticasta, cuando no deja de incurrir en todas sus prácticas ni de sumar a lo más rancio de ella a su gobierno.

La duda y la imprevisibilidad siguen siendo los ejes de la actual gestión. (www.REALPOLITIK.com.ar)


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