República de Annobón: “Necesitamos reconocimiento para liberarnos de la masacre de Guinea Ecuatorial”

"La dictadura de Teodoro Obiang Nguema lleva 45 años y está por cumplir 46 ya, desde la independencia de Guinea Ecuatorial, que es un país inventado por el estado colonial de ese entonces. Hemos vivido una situación de marginación, una situación de subordinación, descontrol total, abandono, falta de energía eléctrica, sanidad y educación", inició el primer Ministro de la República de Annobón, Orlando Cartagena Lagar.

Y siguió: "Además, el barco de Guinea se acercaba a la isla de Annobón una vez al año y esto produce que esta región, al ser una isla que no tiene contacto con ninguna parte del mundo, tenga carencias imposibles de explicar porque hasta que no vuelve el barco no tenemos ni siquiera dónde comprar algo tan simple como un lápiz". "Es una situación de genocidio que empezó en tiempos de la colonia, porque fue en esos momentos que los barcos comenzaron a ir una vez cada tres meses y no se puso absolutamente ningún reparo", sentenció la autoridad annobonesa

En esa línea, Orlando Cartagena Lagar contó en primera persona las torturas que sufrió por parte de la dictadura de Guinea Ecuatorial, que incluyeron “patadas, puñetazos, escupitajos, todo lo que te puedes imaginar”. Al respecto, contó: “Cuando ya estaba medio muerto, me ataron las manos y los pies para atrás, y me ataron de un árbol. Al lado del árbol había unos trozos de un pilar de tiempos coloniales y me los pusieron encima de la espalda y saltaba un señor encima de estos trozos, hasta que la cuerda que me ataron penetró dentro de mi cuerpo y ya no se veía”. Luego, la tortura continuó: “Al día siguiente recuperé de conocimiento, estaba tirado y los compañeros me tiraban tierra en el suelo magullado sobre las heridas para coagular la sangre. Hoy tengo que vivir con pastillas porque lo que me hicieron ahí no es para estar vivo. Pero tenía que estar vivo para contarlo”.

Annobón está ubicado en el Golfo de Guinea.

“Cuando nos trasladaron a la región continental, a la Guinea Ecuatorial real, me hicieron en esas situaciones subir por unas escaleras para ir a tomar declaración frente al teniente coronel don Agustín Tomona, que era el terrorista que encabezaba aquel dramático barco que llegó a Annobón al día siguiente. Las preguntas que me hacían era para morirse, tortura psicológica, patadas en las heridas que ya tenía, escupitajos… No tiene nombre. Y Amnistía Internacional intervino porque después consiguieron que nos dieran paracetamol y algún medicamento para poder curarnos”, agregó. Y detalló: “Luego, en la intervención que tuvimos en el juicio, donde nos condenaron a muerte a dos personas, al final redujeron la pena a 28 años de cárcel, aunque estuvimos no sé si seis meses, porque comprobaron que la situación que contábamos era real”.

“Antes de que saliese el barco de Annobón con nosotros magullados, iban de casa en casa violando niñas, que es lo que más me duele hasta hoy. Entrar a una vivienda y violar a una niña de doce años delante de sus padres, diciendo: ‘Mira cómo voy a violar a tu niña, para que lo veas tu’, eso no lo voy a perdonar hasta que me muera. Eso no se puede perdonar”, afirmó Cartagena Lagar.

Luego, el primer Ministro fue consultado sobre los trascendidos en torno a la práctica de la antropofagia en la cúpula de la dictadura ecuatoguineana: “Los que están en desacuerdo con esas prácticas son los que difunden las imágenes (que salieron a la luz), para que haya presión contra este gobierno. Es una tribu ancestralmente terrible, es lo que utilizaban para torturar a todos los guineanos, a todos los de la Santa Isabel y a todos los annoboneses. Y esa tribu es la que cogió el gobierno desde entonces y sin piedad ni control alguno, con todo el poder absoluto, poder económico y poder de la iglesia -porque todos los obispos son de esta tribu, todos los obispos tienen más de cinco o seos mujeres y treinta y cinco mil niños- siguen comiendo carne humana, según ellos mismos lo publican”.

Cartagena Lagar, en el último encuentro de la Organización de Naciones y Pueblos No Representados (UNPO).

“No tenemos ninguna razón para seguir en este país. Ademas necesitamos salir de ahí, necesitamos reconocimiento y apoyo del mundo para liberarnos de esta masacre. Esto no se puede aguantar”, exclamó. Y siguió: “Estamos luchando por la independencia de Annobón, por la libertad del pueblo de Annobón y pedimos formalmente a la unidad internacional, a la UNPO -que es a donde nos incorporamos como miembro- y a todos los organismos, países del mundo, para que nos den su apoyo, su solidaridad, su reconocimiento. No hemos hecho nada a nadie para merecernos esto. Necesitamos ayuda urgente porque la situación sanitaria de Annobón es una situación de emergencia sanitaria y se necesita una respuesta ya. De lo contrario, vamos a desaparecer".

“Guinea ecuatorial no es ni un país ni un pueblo, es un terrorífico país, es un terrorista el que está enfrente y que dejen de llamarlo presidente, es un caníbal, es un terrorista que impide el agua a su pueblo, que impide la sanidad, que destroza toda la educación y solo crea cárceles y delincuentes. No se puede llamar a esto país y se tiene que desuscribir esto de la ONU, esto no puede ser un país integrado en la ONU porque es una maldición, es una falta de respeto a la humanidad. Y Teodoro Obiang Nguema Mbasogo tiene que vivir esta realidad de ver desintegrar su país porque este país no es Annobón. Annobón no participa ni pertenece. Annobón es solo de los annoboneses y de nadie más”. (www.REALPOLITIK.com.ar)

APOYÁ A
REALPOLITIK

Periodismo independiente.
Información sin censura.

COLABORÁ DESDE $290 POR MES

COMENTÁ / VER COMENTARIOS