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Las palabras de Romero durante su discurso principal no pasaron desapercibidas, generando un debate sobre responsabilidad y acción colectiva en la actualidad.
En el marco del 208º aniversario de la Declaración de la Independencia, la intendenta Rosario Romero y el viceintendente David Cáceres presidieron los actos oficiales, los cuales incluyeron el izamiento del Pabellón Nacional en Plaza 1º de Mayo, un solemne Tedeum en la parroquia San José Obrero y un desfile cívico-militar sobre avenida Zanni. Sin embargo, las palabras de Romero durante su discurso principal no pasaron desapercibidas, generando un debate sobre responsabilidad y acción colectiva en la actualidad.
Romero aprovechó la ocasión para hacer un llamado a la responsabilidad individual y colectiva, destacando la importancia de la autodeterminación. "Siento que es muy importante encontrarnos hoy en este hermoso barrio de la ciudad para celebrar y conmemorar la Independencia. Se trata de reconocer un punto de partida, honrar ese origen y también esa palabra que tiene tantos sentidos. Ser independiente es abrazar el derecho de autodeterminación y la responsabilidad de hacernos cargo", señaló.
En un tono crítico, la intendenta subrayó la necesidad de asumir las consecuencias de nuestras acciones. "Hoy, como hace 208 años, en Argentina necesitamos hacernos cargo de lo que hacemos y de lo que no hacemos. No para repartir culpas o acusar a los otros, sino para tomar la decisión de nuestro destino y elegir los mejores modos de convivencia. Podemos ser mejores, estoy segura, somos buenos, pero podemos ser mejores", enfatizó.
El viceintendente David Cáceres, por su parte, reforzó el mensaje de responsabilidad y solidaridad, especialmente hacia los más desfavorecidos. Valoró el mensaje de Monseñor Alberto Puiggari en el Tedeum, resaltando la importancia de enfocarse en aquellos que más sufren y de buscar soluciones a través del diálogo y el consenso.
El evento contó con la presencia de una gran cantidad de público, incluyendo veteranos de guerra, representantes de fuerzas armadas, y ciudadanos de diversos barrios de la ciudad. Las reacciones fueron variadas, con algunos asistentes expresando su emoción y apoyo a los valores nacionales.
"Un acto muy emocionante, más siendo yo un oficial principal retirado de Marina. Es muy valorable que sea en este lado de la ciudad y con tanta gente que acompaña. Esto reafirma nuestra soberanía nacional, algo que nunca se tiene que perder", sostuvo Carlos Benavídez, vecino de la zona.
"Me parece bárbaro que volvamos nuevamente a lo que fue nuestra infancia, nuestra juventud y poder ver las Fuerzas Armadas y a la gente desfilar. Es importante valorar nuestra argentinidad", resaltó Sergio Kremer, de barrio Rocamora. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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