Un asesinato lleno de irregularidades complica al intendente de Alberti

La madre de la víctima, Susana Ríos, ha denunciado públicamente enormes irregularidades en la investigación del caso, apuntando a una presunta trama de corrupción que involucra a altos funcionarios locales, con el intendente German Lago a la cabeza, y a la policía.

Según relata Susana en un video que se ha difundido ampliamente, el subcomisario Mario Stachiotti habría intentado intimidarlos poco después de la muerte de Luis Etcheverry, sugiriendo que la investigación no convenía al jefe comunal, quien en ese momento estaba en plena campaña por la reelección. Susana sostiene que su hijo conocía un circuito de tráfico de drogas que llegaba hasta el propio German Lago. Todas sus declaraciones fueron confirmadas en diálogo con REALPOLITIK.

Luis, según los testimonios de su madre, había descubierto la detención de un automóvil que intentaba ingresar cocaína en Alberti. Esta droga, según el detenido de apellido Piedrabuena, habría estado destinada al mismísimo intendente. Después de compartir esta información con su familia, quienes le pidieron discreción por temor a represalias, Luis habría comenzado a ser vigilado. Semanas más tarde, fue encontrado sin vida en el baño de su casa, con signos de ahorcamiento.

El hallazgo del cuerpo fue realizado por Edgardo Etchart, cuñado de la víctima, quien había acompañado a Celeste Ferro, la madre del hijo de Luis, ambos señalados por Susana Ríos como cómplices de la policía y el tráfico de estupefacientes.

Susana acusa a Ferro de estar involucrada en la distribución de drogas y también sería víctima de su consumo. Por el mismo hecho, señala a una persona de apellido Vergara, quien también habría encubierto partes cruciales de la muerte de Luis y, de manera misteriosa, se quitó la vida en su domicilio poco después de haber intimidado a los otros hijos de Susana.

La mujer, profundamente afectada, recuerda la última vez que vio a su hijo con vida. "El día que salió de casa me dijo 'no cierres la puerta, vieja, que ahora vengo' y nunca más volvió", expresó con dolor.

Susana y su esposo Ricardo se constituyeron como particulares damnificados en la causa, pero se encontraron con obstáculos constantes. No se les permitió acceder a la autopsia ni a documentos cruciales, y nunca fueron citados a declarar, ni siquiera su hijo mayor, quien fue el primero en encontrar el cuerpo de Luis y declaró que no estaba colgado del ventiluz del baño, como consta en la causa, sino arrodillado, lo que aumenta las sospechas sobre un eventual asesinato.

El abogado Rafael Acuña que representaba a la familia Etcheverry se apartó del caso hace algunas semanas, alegando que el fiscal quería cerrar la causa, dejando a la familia desprotegida y sin asistencia legal. Susana, Ricardo y sus hijos, una familia de bajos recursos con una hija con discapacidad que todos los días pregunta por su hermano, se encuentran en una situación desesperada, buscando justicia para Luis. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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