Jujuy: Controversias con la tasa GIRSU ponen en jaque al gobierno

La reciente implementación de la Tasa GIRSU, un nuevo impuesto destinado a financiar la recolección, barrido, limpieza, tratamiento y disposición final de residuos, ha generado un gran malestar en varias localidades del interior provincial. Este tributo, que busca cerrar basurales a cielo abierto y mejorar la gestión de residuos, está causando una división entre las autoridades y los ciudadanos.

El gobernador Carlos Sadir defendió con firmeza la necesidad de la Tasa GIRSU durante su visita a Palpalá, un lugar donde el rechazo a la medida es particularmente fuerte. Sadir argumentó que la tasa no es una novedad, ya que anteriormente existían impuestos similares para la recolección de residuos, y que el programa GIRSU es esencial para solucionar problemas históricos relacionados con la acumulación de basura. “El programa GIRSU lo que hace es cerrar los basurales a cielo abierto”, afirmó el gobernador.

A pesar de la defensa gubernamental, la implementación de la tasa ha enfrentado una fuerte oposición en varias localidades. En Libertador General San Martín, San Pedro y Perico, la tasa ha sido aprobada y ya está en vigor, pero ha sido recibida con descontento por parte de los vecinos, quienes consideran que representa una carga económica adicional en tiempos de dificultades financieras. En Monterrico y San Antonio, la tasa está en fase de análisis y se espera que sea discutida en breve.

En Palpalá, el descontento ha alcanzado niveles notables. Han pasado dos semanas desde que se introdujo el proyecto de ley en el Concejo Deliberante, y aún no se ha debatido. La situación ha llevado a los residentes a organizar una recolección de firmas para solicitar una audiencia popular y expresar su oposición a la tasa. El gobernador Sadir, sin embargo, asegura que la medida es necesaria para abordar los problemas de residuos y mejorar la limpieza urbana.

La tensión en torno a la Tasa GIRSU resalta un desafío crucial para las autoridades: encontrar un equilibrio entre la necesidad de mejorar la gestión ambiental y la carga económica que representa para los ciudadanos. El debate sobre esta medida continúa, y la respuesta de los vecinos y las autoridades determinará el futuro de esta controversial tasa. (www.REALPOLITIK.com.ar).

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