Nacionales
Crisis en el gobierno
El circo libertario profundiza su interna
No fue la política la que provocó la disrupción, sino un streamer futbolístico, “El Duka”, quien salió a interpelar a Cristina Fernández de Kirchner, instándola a que saliera de su comodidad prescindente para ponerle el cuerpo a la catástrofe social y económica que implementó el gobierno de Javier Milei.
“El Duka”, quien reconoció “no haber sido de Cristina”, pero que cambió de actitud con el intento de magnicidio sufrido por la ex presidenta, despertó a todos los demonios de la interna del pan peronismo. Rápidamente comunicadores y referentes cristinistas salieron a apoyar la propuesta del ex presidente de Independiente, y hasta la propia Cristina disparó un debate por X con Javier Milei, que terminó modificando los contornos del tablero político. Así la ex presidenta salió de su letargo y recuperó parte de su antiguo protagonismo, y Milei sacó distancia respecto de un Mauricio Macri que ya no sabe qué hacer para tratar de volver a la consideración pública.
A Javier Milei le vino muy bien la decisión de Cristina, ya que lo pone como su antagonista en una nueva grieta que ya no tiene al ex presidente como actor. Sobre todo en un momento en el que las encuestas que maneja el gobierno lo ubican por debajo de los 40 puntos, y en el que el juicio público sobre su gestión trepa a una desaprobación del 57 por ciento.
Para La Libertad Avanza el desafío de gobernar ha sacado a la luz toda su improvisación y su falta de pericia. En lugar de acumular nuevos legisladores, ha perdido a buena parte de los propios en el marco de confrontaciones y agresiones internas sin precedentes en fuerzas políticas que desempeñan el tramo inicial de su gobierno. El viernes pasado, Santiago Caputo ordenó a Manuel Adorni que desacreditara las certezas que había dado Guillermo Francos sobre una disposición a revisar el DNU que pone cepo a la actividad periodística, birlándole el acceso a la información pública. Se trata de una disposición claramente anti-democrática y reñida con la letra y el espíritu de la constitución. Brevemente, del choque Francos salió malherido y debió internarse en una clínica durante el fin de semana, en medio de rumores sobre su supuesta renuncia.
A esta altura de los acontecimientos ya prácticamente nadie, ni en el oficialismo ni en la oposición, soporta al Mago del Kremlin, ni mucho menos aceptan su condición de monotributista contratado como asesor por Karina Milei, que desde ese lugar aparentemente secundario controla las dos terceras partes del estado. Ni siquiera Patricia Bullrich, cuyas acciones están en caída libre, y que se distrajo por un momento de sus adulaciones permanentes al presidente Milei para comparar a Caputo con Antonio de la Rúa y Marcos Peña, a quienes acusa de ser los responsables de la debacle de los gobiernos que integró cada uno.
En el inicio de una semana decisiva, en la que el Senado debe tratar el veto a la mejora jubilatoria, la ley de Financiamiento Universitario y la anulación del polémico DNU que le asignó 100 mil millones de pesos a la SIDE como fondos reservados y con un Francos maltrecho que salió de su internación para continuar con tratamiento ambulatorio, Karina Milei debió presidir la reunión con legisladores propios y aliados para definir la estrategia a desplegar en esos casos. Lo llamativo es que debió ponerse a la cabeza a solicitud de los participantes, que tienen muy en claro por dónde pasan las decisiones en este gobierno. Santiago Caputo también era esperado, pero una vez más pegó el faltazo. Es que el líder de los Peaky Blinders es tan rápido para operar a través de su ejército de trolls como temeroso de dar la cara y exponerse personalmente.
Sobre su velocidad y efectividad puede dar cuenta el operador mediático Eduardo Feinmann, quien se convirtió en la víctima más reciente de sus ataques. El comunicador de Mauricio Macri había atribuido a Guillermo Francos la frase: "Si manda Caputo, me voy", acompañada de un intento de renuncia que no prosperó, antes de terminar internado. Tal como es costumbre del asesor presidencial, le respondió a través de uno de sus alfiles, Traductor Te Ama, quien posteó en X: "Es absolutamente falso todo lo que dice Feinmann acá. No renunció. No hubo peleas. No hay ni habrá pauta. Los trolls pagos son los periodistas".
La respuesta de Fenimann no fue precisamente conciliadora: "Por mí la pauta se la pueden meter bien en el orto", sentenció.
Desde la cuenta de X que se atribuye a Santiago Caputo, @bprearg, llegó la contestación: "Mensaje a los operadores mediáticos al servicio de intereses políticos disfrazados de periodistas: si creen que se van a llevar puesto al jefe de Gabinete permítanme decirles que les va a fallar el operativo". A lo que Fenimann respondió a su vez: "Nadie quiere llevarse puesto al jefe de Gabinete. Dejen de boludearlo en el gobierno", para finalmente concluir: "El gobierno debería cuidar a un jefe de Gabinete de lujo como Guillermo Francos. Deben dejar de lado el libro: el arte de ganar elecciones, y leer más el arte de gobernar".
En este clima de catástrofe social y económica y de permanentes estallidos internos dentro del gobierno, la propuesta de “El Duka” cobra cierta razonabilidad. Sobre todo si se tiene en cuenta que, en el conurbano, la ex presidenta supera en imagen al presidente actual. Claro está que para Milei es una tranquilidad que Cristina afirmara que no convalidará un juicio político o un eventual intento de deposición ya que “a Milei lo votó la gente”. Pero, indudablemente, su protagonismo público creció en los últimos días, lo que le permitirá hacer más daño a cualquier intento de reconfiguración del campo popular. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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Marcos Peña, Patricia Bullrich, Eduardo Feinmann, Mauricio Macri, Cristina Kirchner, Karina Milei, Manuel Adorni, Guillermo Francos, Santiago Caputo, Javier Milei, El Duka¿Qué te parece esta nota?