Municipales
¿Vendetta?
La versión más fuerte: Mauricio Macri, el ideólogo de la detención de Edgardo Kueider
La detención del senador Edgardo Kueider en Paraguay, sospechada de ser una operación política vinculada a Mauricio Macri y Horacio Cartes, desata especulaciones sobre corrupción, tensiones entre el oficialismo y la oposición, y un posible impacto en la gobernanza del gobierno de Javier Milei.
La noticia de la detención del senador Edgardo Kueider cuando ingresaba junto con su secretaria a territorio paraguayo detonó el tablero político. Muchos se preguntaron desde cuándo existe tanto control para acceder al país vecino, a la 1.30 de la madrugada y siendo senador nacional que revista en las filas del oficialismo -tal como se presentó el entrerriano-. La respuesta es obvia: más allá de la veracidad de los hechos, a Kueider le hicieron una cama, con moñito y todo.
La segunda pregunta es quién podría contar con los medios para implementar la operación. En la dirigencia política tampoco hay dudas, aunque no existan pruebas concretas: los dedos acusadores apuntan sistemáticamente a Mauricio Macri, quien mantiene una estrecha amistad con el ex presidente paraguayo Horacio Cartes, “el dueño del Paraguay y de su gobierno actual”, tal como se lo conoce.
No caben dudas de que, en este montaje cinematográfico, Kueider es apenas un perejil. "Un hombre del sistema político, que viajaba en una camioneta que es propiedad de un empleado de la biblioteca del Congreso. Es de la política", afirmó a este medio, en absoluto off the record, un legislador libertario.
Otro legislador aportó en favor de la misma tesis: "Kueider ya hizo ese viaje media docena de veces y nunca nadie los paró o no había retenes policiales en la zona. Pero, de pronto, un día ponen un patrullero, te paran, te piden los documentos, no les importa que seas un senador argentino y caés". Demasiado sospechoso para ser una casualidad.
Desde la bancada del Pro, en tanto, negaron cualquier relación entre la detención de Kueider y Mauricio Macri: "El tipo se pasó de vivo y lo agarraron por boludo", afirmaron.
¿A dónde fue dirigido el disparo?
En este caso no hay dudas en la dirigencia política: la detención del senador en Paraguay habría sido un mensaje de Mauricio Macri al gobierno, como respuesta al sistemático ninguneo que recibe de Javier Milei y su triángulo de hierro. Más aún, otra prueba de que se trataría de un tiro por elevación al presidente argentino parece quedar claro en el hecho de que el abogado del propio Cartes se ha hecho cargo de su defensa.
Javier Milei.
Por más que Javier Milei intentó despegarse de la situación, afirmando que se trataba de “un senador elegido por la lista de Cristina”, queda en claro que Kueider jamás mantuvo buenas relaciones con ella, y que su inclusión en la boleta electoral fue el resultado de una negociación con el entonces gobernador Gustavo Bordet, un peronista colaboracionista con el gobierno de Mauricio Macri.
Las consecuencias
La detención de Kueider dispara dos cuestiones muy graves para el gobierno nacional: por un lado, hace implosionar la pretendida “pureza” del gobierno actual, demostrando una vez más que no sólo no es anti-casta, sino que recurre a los peores recursos de la política tradicional para conseguir sus objetivos. El affaire Kueider podría convertirse en un nuevo caso Banelco, que permite sospechar el tráfico de coimas y prebendas para comprar voluntades legislativas. La sospecha de corrupción ya está instalada: habrá que ver cuándo y hasta dónde se tirará del hilo para saber sus verdaderas implicancias.
La segunda tiene que ver con la gobernanza. Una eventual destitución del senador entrerriano implicaría su reemplazo por su suplente, una militante de La Cámpora, por lo que se incrementaría la influencia de Cristina Fernández de Kirchner en la cámara alta. Muy preocupado, Milei ordenó “cerrar el Senado” para evitar la expulsión de Kueider y la concreción de ese reemplazo. Unión por la Patria, por su parte, pretende sacar rédito político tratando de sumar voluntades para una sesión extraordinaria que permita concretar el enroque.
Senado Nacional.
Aquí, Mauricio Macri y el Pro se encuentran en un problema: si se suman a la destitución favorecen a Cristina; si no lo hacen, quedarán pegados a la sospecha de corrupción. Por esta razón es que la vicepresidenta, Victoria Villarruel, instó a “dejar que la Justicia se expida”. Tal como viene sucediendo desde hace bastante tiempo, y en caso de que Macri realmente sea el autor intelectual de la maniobra, una vez más se habrá disparado en los pies.
Lo que preocupa en el gobierno no sólo son las consecuencias de su eventual destitución, sino que, en caso de soltarle la mano, que el senador decida vomitar la verdad en los medios, lo que podría causar un daño irreparable a la gestión.
Por ahora, todas son especulaciones. Pero el dinero sucio existe y el historial de denuncias y causas en trámite que pesan sobre Kueider por cuestiones similares no ayuda a postular ningún juicio en favor de su inocencia. ¿Quiénes están detrás de los 211 mil dólares que le detectaron contrabandeando a territorio paraguayo? ¿Cuánto trasladó en sus viajes anteriores? ¿Cuál es la vinculación entre ese dinero mal habido y la aprobación de la ley Bases y de otras iniciativas oficiales?
Antes de cumplir una año de gestión, la bomba de la sospecha de corrupción ya le estalló en las manos al gobierno de Javier Milei. Tendrá que salir a hacer control de daños de manera urgente. Otra alternativa es un desenlace siguiendo los códigos de la mafia. Un diciembre recalentado, tal como lo suelen ser en nuestra Argentina. (www.REALPOLITIK.com.ar)
ETIQUETAS DE ESTA NOTA
¿Qué te parece esta nota?
MÁS NOTICIAS