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Los vecinos han manifestado su preocupación ante los intensos olores nauseabundos que emanan de las aguas servidas estancadas, lo que también ha causado la proliferación de insectos y alimañas, incluyendo víboras.
El barrio Martijena en Palpalá enfrenta una grave situación de salud y seguridad debido a una importante pérdida de líquidos cloacales que lleva semanas sin solución. Los vecinos han manifestado su preocupación ante los intensos olores nauseabundos que emanan de las aguas servidas estancadas, lo que también ha causado la proliferación de insectos y alimañas, incluyendo víboras.
El problema, que ya había afectado a otros barrios de Palpalá el año anterior debido al desborde de cloacas, se ha repetido con fuerza en este inicio de 2025. A pesar de que los residentes han realizado reclamos, las reparaciones han sido insuficientes y temporales, lo que ha generado una sensación de abandono en el área.
Una vecina expresó su indignación: “Hace varios días, desde que comenzaron las lluvias, se viene estancando el agua y hay que aguantar esos olores, los bichos... es insoportable. Últimamente aparecieron víboras en la puerta del domicilio. Vienen siempre con las máquinas, hacen algún arreglo pero al tiempo vuelve a estar lo mismo”. La vecina destacó además que la falta de solución parece ser un problema histórico en la zona, agravando aún más las condiciones de vida en el barrio.
Los vecinos exigen una solución definitiva ante la recurrencia de este problema sanitario, que afecta tanto su calidad de vida como su seguridad. (www.REALPOLITIK.com.ar)
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