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La Avenida Luciano Catalano, una de las principales arterias de Palpalá, amaneció cubierta de líquidos cloacales mezclados con el agua de lluvia, generando un panorama preocupante para residentes y transeúntes.
La Avenida Luciano Catalano, una de las principales arterias de Palpalá, amaneció cubierta de líquidos cloacales mezclados con el agua de lluvia, generando un panorama preocupante para residentes y transeúntes. El derrame se extendió hasta las casas cercanas y afectó a quienes esperan el colectivo en la zona, incrementando el malestar de los vecinos, que aseguran que este problema es recurrente.
Los comerciantes y residentes de la zona manifestaron su frustración ante la falta de soluciones definitivas. “Hoy el olor de la cloaca es insoportable, los vehículos pasan y salpican la vereda, el olor queda pegado a las paredes”, comentó un comerciante afectado.
La empresa Agua Potable inició trabajos en un sector cercano, pero los vecinos aseguran que no se han abordado las causas de fondo. A esto se suma el hecho de que días atrás se registró una situación similar en el barrio Martijena, la cual fue solucionada solo después de haber sido expuesta en los medios.
La acumulación de aguas servidas no solo genera incomodidades por el mal olor y las salpicaduras, sino que también representa un riesgo para la salud pública. Con el tránsito constante, el problema se agrava, ya que los vehículos dispersan los líquidos hacia las veredas y viviendas cercanas.
Vecinos y comerciantes insisten en que el sistema de desagües y cañerías de Palpalá necesita un recambio urgente para evitar estos episodios recurrentes. La falta de mantenimiento adecuado y soluciones estructurales continúa afectando la calidad de vida en esta localidad.
Mientras tanto, los afectados esperan una respuesta concreta de las autoridades locales y provinciales, que garantice el bienestar de la comunidad y la prevención de futuras emergencias sanitarias.
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